Vecinos del Bordo de San Jerónimo, que se ubica a un costado de la carretera Toluca-Palmillas, denunciaron la muerte de patos silvestres que se asentaron desde hace varios meses en el afluente.
En un recorrido que realizó MILENIO Estado de México, se pudo observar que en la orillas de la laguna se encuentran los restos de varias aves. Incluso, han fallecido en la zona algunos peces y garzas.
"Desde hace varios días hemos visto que comenzaron a morirse los patos, en las orillas del bordo hay varios muertos, del lado de la carretera contabilizamos los cuerpos de seis patos", dijo una vecina.
Tiradero clandestino en Texcoco
En el Lago de Texcoco, un predio de 300 hectáreas, ha sido ocupado clandestinamente como tiradero de desechos de rastro: vísceras, pelo, plumas, sangre y otros residuos biológico-infecciosos que se descomponen al aire libre, generando un olor penetrante y repulsivo varios kilómetros a la redonda, además de lixiviados que contaminan el acuífero, pese a que hace año y medio se decretó como Área de Protección de Recursos Naturales.
“Hay un señor que tiene tiempo, se ha hecho un cacique de toda esta zona, y no le han podido hacer nada, se ha hecho inmensamente rico con el tiradero de desperdicios de sangre, de tripas, de todo lo que sale del rastro y mi reclamo es, si es Área Natural Protegida, ¿por qué no les hacen nada?”, expresó el ejidatario Jesús Romero, uno de los afectados.
El predio de 300 hectáreas, situado dentro del área protegida es hogar de diversas especies de aves, entre ellas garzas blancas y negras a las que se les ve comiendo la carroña depositada ahí.
Esas tierras pertenecen a los ejidos de San Felipe y Santa Cruz de Abajo, que además es zona federal, que está bajo la administración de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
RARR