Alma entra de rodillas a parroquia de Torreón tras correr 20 km en agradecimiento a la Virgen

"Le pedí a mi madre que bendijera a todas las personas por donde yo iba pasando", dijo Alma Franco Pérez.

Alma Franco Pérez. | Especial
Lili Figueroa
Torreón, Coahuila /

La devoción por la morenita del Tepeyac no tiene limites pues sus más fieles seguidores harían lo que sea por ella para demostrar su fervor y agradecimiento por los milagros cumplidos, tal es el caso que se aprecio en las peregrinaciones de Torreón, Coahuila, donde Alma Rosa Franco Pérez arranca el recorrido corriendo desde su hogar, sube al Cerro de las Noas, y concluye hincada en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe.

"Uno tiene tantas cosas en el corazón qué agradecer y también qué pedir a nuestra Madre Santísima, que comencé esta manda, esta devoción de entrar al templo de la Virgen de Guadalupe de rodillas, y me llena mucho, me hace sentir bien porque todos los días tenemos qué agradecer por algo, no nada más cada año", es lo que manifestó a MILENIO la lagunera Alma Rosa Franco Pérez.

Alma Rosa compartió que este 12 de diciembre, fue la segunda ocasión que lo hace en el año, y piensa continuar realizándolo muchas veces más, no sólo en las fiestas Guadalupanas.

"Yo tengo mucho que agradecerle a mi Madre Santísima, van dos veces que la hago, a mitad de año hice la ruta desde por el Cereso, me vengo corriendo hacia el Cristo de las Noas, bajo por atrás del cerro, por la Alianza, llego corriendo aquí a la parroquia y entro hincada hasta llegar al altar".

Relató que hace seis meses entró de rodillas, y enteramente llena de fe asegura que la Virgen escuchó sus peticiones, 

"uno tiene tantas cosas en el corazón qué agradecer y qué pedir, y ahora lo volví a hacer por mi familia, por mis hijos, por tanto que tengo que agradecerle a mi virgencita, me siento muy bien, venía ya cansada y en este momento siento que ya cedió el dolor, me permitió llegar de rodillas hasta el altar y eso es hermoso para mí".
"Eso es algo que yo lo viví con mi madre Elsita, que en paz descanse, cuando me traía a la iglesia yo lo veía y ahora con tristeza veo que ya nadie lo hace, a veces es necesario un poquito de ofrecimiento a mi Madre Santísima por todo lo que nos ha dado como madre".
"Ella nos dio a Jesús con gran amor y hay tantas y tantas cosas qué agradecerle, una de ellas, fue la salud de mi amiga Lili quien estuvo al borde de la muerte, yo estuve orando por ella, varios rosarios, a la par yo estaba enferma, oré muchísimo por ella y llegué a ver a mi virgencita, no estaba dormida estaba despierta, pero era por tanta oración que estuve haciendo, la ví vestida con una luz radiante de blanco, y al lado ví a mi amiga Lili y a otra amiguita que también estuvo grave, y yo, nos estaba cubriendo con sus brazos, nos estaba protegiendo, entonces a mí no se me olvida que Dios le devolvió su salud a esta amiga tan grave y que aquí anda ya como si nada, que maravilloso, tengo mucho qué agradecer".

Sin duda alguna para Franco Pérez caminar de rodillas es sinónimo de agradecimiento, por lo que en esta ocasión, la mañana de este martes salió de su casa, en el fraccionamiento Latinoamericano de Torreón y se fue corriendo una vez más rumbo al Cristo de las Noas.

"Subo por atrás, luego bajé por La Jabonera, y llegando a la parroquia dí un recorrido para cumplir mis 20 kilómetros, y desde la entrada me vengo hincada hasta el altar".

Al cuestionarle a Alma, qué le diría en este día a la Emperatriz de América, contestó, "que estoy muy agradecida con ella porque la siento en el alma, es algo que yo le había pedido muchísimo, me vine en todo el trayecto rezando mi rosario hasta llegar aquí, le pedí a mi madre que bendijera a todas las personas por donde yo iba pasando, y estoy segura de que sí lo hizo".

Compartió que ella hace reliquia el día de la Virgen de San Juan, "ese día hago rosario y todo en familia, porque los 12 de diciembre nos dedicamos mi esposo y yo a rezar y cantar rosarios y mi papá me acompaña, él quiere seguir recordando este día porque mi mamá siempre le hacía su rosario, y ella ya está en el cielo, y pues agradecida estoy por tenerlo a él, mi hermano José cumplió años hace dos días y también estuvimos con él un momento en familia y en oración, muy bonito".

Para finalizar, Alma Rosa brindó el siguiente mensaje a los feligreses, "no nos alejemos de mi padre Dios, porque con Dios todo, sin él nada, y mamita María es la madre de mi Señor, así que estamos más que agradecidos con ella".

arg



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