Gracias al buen corazón de muchos laguneros, el pequeño Romeo, niño con síndrome de Down, que fue discriminado al no ser invitado a la graduación de su jardín de niños en días pasados, este martes por la tarde pudo celebrar a bordo de una caravana donde los regalos, piñatas, pastel y una limusina no pudieron faltar.
Entre porras, aplausos, muestras de afecto y gracias al apoyo de decenas de laguneros este martes Romeo vivió un momento inolvidable al celebrar su graduación, pero en compañía de sus amigos y vecinos de la colonia Vencedora.
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Fue en punto de las 16:00 horas cuando el sonidero calentó los motores de dos deslumbrantes limusinas que en su interior aguardaban un sin fin de sorpresas para Romeo. Abdul Herrera, propietario del negocio, dijo sentirse contento por contribuir para hacer pasar momentos felices.
En el poniente de la ciudad de Torreón, sobre el bulevar Revolución, y la calle Ildefonso Fuentes ya aguardaba el pequeño acompañado de sus familiares y amigos.
Por su parte, Valeria, madre del menor, dijo estar agradecida por las muestras de afecto y hacer posible que su hijo viviera una experiencia grata.
Entre música, robots de luz el graduado y sus acompañantes dieron recorrido por la zona centro para realizar una última parada en la Torre Eiffel de Gómez Palacio donde pudo disfrutar de una sesión fotográfica como parte de los obsequios.
EGO