La muerte de una mascota puede ser difícil para las personas ya que enfrentan dolor, angustia, desesperanza y soledad. En los últimos años la interacción entre las personas y los animales ha sido mayor, pues la pandemia fue una etapa que generó un acercamiento no solo con la familia, sino con las mascotas que anteriormente eran animales que se tenían en el jardín o en la azotea.
La convivencia cotidiana con las mascotas ha desarrollado una cultura del cuidado-alimentación que integran el concepto de ‘Pet Friendly’ (mascota amigable), lo que lleva a contar con diversos servicios como veterinarias, estéticas caninas y ahora los crematorios en donde se ofrecen servicios completos de velación e incineración para las mascotas.
El acompañamiento, pieza fundamental del proceso
Adriana Hernández, tanatóloga y propietaria del crematorio ‘Huellitas con Alas’, manifiesta que muchas de las veces el primer contacto es con el veterinario quien se encarga de la parte de la salud, higiene y alimentación de la mascota, la cual al momento de enfrentar alguna enfermedad terminal solicita el apoyo del crematorio, pues la familia quiere saber qué hacer en esos momentos
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En ocasiones la mascota todavía no muere, por lo que se acude a la veterinaria o al domicilio en donde se le sugiere a los propietarios el acompañamiento de su mascota en este proceso tan doloroso.
“A veces lo más difícil es decir no quiero ver porque me duele, es cuando entramos nosotros y le decimos, tu mascota también siente y tiene el derecho también en su último momento de estar rodeado por las personas a las que ama, es su graduación de la vida, entonces se pide que lo acompañen”.
Durante este proceso se le recomienda a las personas darle las gracias y decirle lo mucho que fue amado, querido y que se le va a extrañar, pues una vez que se tiene la pérdida, viene la crisis y posteriormente el duelo.
“Cuando ya muere la mascota, te hace entrar en un momento de crisis, pero todo lo que se vive ahí, con las herramientas que les damos, lo van a vivir de una manera diferente, el enfoque ya no va a estar en ti, va a estar en el agradecimiento y en el amor que tú le vas a expresar a tu mascota en esos momentos”.
¿Qué pasa cuándo no es muerte natural?
A veces la situación no es la misma, ya que la mascota pudo haber muerto en un accidente o por envenenamiento, por lo que el duelo es diferente, es por eso que se ofrece también consulta de tanatología que se incluye en los paquetes de cremación.
Una de las recomendaciones es que desde niños se les enseñe que la muerte existe y que, en el caso de la mascota, su vida termina, pero que cumplió su misión, que fue dar y recibir cariño, amor, cuidados.
“Lo van a recordar con tristeza, pero con la satisfacción de que lo acompañó, de que le dio lo mejor, de que le dijo gracias, no todos expresamos con palabras, a veces hacer un video y ponerle música o hacerle un dibujo una cartita, los vamos orientando en ese proceso”.
No solo son perros y gatos..
En ocasiones la gente que acude llega con algo de pena porque los ven llorar por la muerte de su mascota, sin embargo, asegura que en este lugar lo que se ofrece es un espacio en el que puedan despedir con dignidad a esa mascota que fue su compañera y alguien especial en su vida.
“Hemos aprendido aquí en ‘Huellitas con Alas’, que el amor viene en diferentes presentaciones, nos traen erizos, hamster, aves, hemos cremado mini pig, serpientes, tortugas, caimanes chiquitos, conejos, la generalidad son perros y gatos, pero en si todas las mascotas pequeñas de diferentes especies aquí se despiden”.
Luego de una despedida y agradecimiento, la mascota, pasa al crematorio en donde el cremador programa luego de una evaluación de la mascota conforme a las características físicas, ya sea peso, pelo y edad.
La cremación es individual y puede tardar de media hora hasta 3 horas, por lo que cuando la mascota entra al cremador, los propietarios pueden ver a través de una ventana cuando entra el cuerpo.
Una vez que concluye el proceso los restos pasan al molino y posteriormente se entrega la urna que contienen las cenizas de su mascota.
Con la pérdida viene la tristeza
El crematorio para mascotas es un concepto que maneja la parte humana para darle la oportunidad a las personas de despedir a su mascota, además de una plática en donde se le da un sentido diferente a la pérdida, pues para muchas personas puede ser no tan trascendental, pero para otras representa un compañero que estuvo a su lado por muchos años.
Sergio Oviedo García, tanatólogo, manifiesta que cada vez es más común ver a las familias que tienen a sus mascotas como un ser incondicional, y eso hace que haya una entrega de sentimientos, por lo que cuando tienen una pérdida, es muy doloroso.
“La mascota se vuelve un compañero incondicional y hace que se establezcan vínculos y lazos muy fuertes y a la hora de la pérdida viene ese sentimiento de tristeza, de dolor que nos damos cuenta que la vida pasa muy rápido”.
Es por eso que nace la intención de poder ofrecer este servicio, al momento en el que se percatan de que la gente que no sabe qué hacer con la muerte de su mascota, creando un concepto con gran parte humana, para darle la oportunidad de despedirlo.
“Es muy importante ofrecer servicios que sean legales y dignos, porque le agregamos a las familias la certeza de que lo que recibe son las cenizas de su mascota al tener las instalaciones adecuadas, el horno crematorio de última generación, equipos y gente capacitada”.
Diseños de urnas
El desarrollo de diversos productos ha venido evolucionando este mercado, por lo que actualmente se ofrecen urnas de diversos materiales, formas y colores, pues se pueden encontrar urnas en forma de casa de perro, de corazón con bigotes para un gato, urnas de madera, así como las urnas biodegradables que pueden ser utilizadas en el mar, en jardines o en ríos.
De igual manera, existen dijes de plata y acero inoxidable en donde se depositan parte de las cenizas de la mascota, pues para mucha gente es un recuerdo muy importante que quieren llevar con ellos.
Estos crematorios ofrecen el servicio de recolección de la mascota, se pasa por ella, ya sea al domicilio o la veterinaria. Se cuenta con una área de despedida y agradecimiento, un espacio creado para que los propietarios de la mascota puedan despedir y agradecer el tiempo que vivieron con ella.
Al entregar la urna, también se les otorga un certificado de cremación con la huella de su mascota y su fotografía, detalles que señala, aparentemente son pequeños, pero representan mucho para los dueños.
aarp