El alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda González, solicitó que la Unidad Municipal de Derechos Humanos estuviera presente en el operativo de alcoholímetro, para observar el cumplimiento del protocolo de actuación y observar el trato de los agentes a la ciudadanía, esto como parte del eje de Gobierno “Seguridad y Orden”.
Regidores del Cabildo, así como representantes de la sociedad civil, acudieron la madrugada del domingo 31 de julio al operativo de alcoholemia sobre el bulevar La Nogalera casi a la altura del llamado Nudo Mixteco.
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Miguel Ángel Urrutia de la Torre, titular de la Unidad Municipal de Derechos Humanos, señaló que acudieron como observadores y vigilantes del protocolo del dispositivo de alcoholemia, tras la invitación que les realizó el personal de la Dirección de Vialidad y Movilidad Urbana.
“Desde que se formó la Unidad Municipal de Derechos Humanos, hace poco más de un mes, se busca ayudar a mejorar el desempeño de los agentes viales para beneficio de la ciudadanía”, comentó Urrutia de la Torre.
Durante el operativo estuvo presente también el décimo primer regidor del Cabildo, Christian González Zambrano, quien destacó como un ejercicio sano la presencia del personal de la Unidad, así como de algunos de los miembros del Consejo Consultivo de Vialidad, quienes acuden con frecuencia cuando se instalan los operativos.
En números concretos las acciones preventivas de revisión a los automovilistas produjeron ocho infracciones debido a que el conductor presentaba aliento alcohólico y 11 personas más fueron presentadas ante el Ministerio Público, ya que conducían en estado de ebriedad.
Como han señalado las autoridades la finalidad de aplicar pruebas de alcoholemia a la ciudadanía es evitar que personas no aptas para conducir, por haber ingerido bebidas embriagantes, puedan provocar un accidente.
EGO