Para agradecer que la curación de su hijo de una enfermedad grave y la recuperción de su hija y yerno de covid-19, María Graciela Fuentes Castro realizó una reliquia en honor a San Judas Tadeo a las afueras del Hospital General de Torreón.
María Graciela es devota de este santo y de la Virgen de Guadalupe, debido a que San Judas Tadeo responde a los casos más difíciles, le pidió por el alivio de su hijo que se encontraba grave tras una enfermedad que lo mantuvo internado por más de un mes, y a las pocas semanas regreso, pero en ese momento para que su hija y su yerno fueran atendidos de emergencia por covid-19.
Al enfrentarse María a cambios de clima como de frío y calor, al igual de tener que dormir en el suelo, pasar inclusive hambre, decidió llevar esta reliquia a las afueras del Hospital General y poder obsequiar un plato de comida caliente a todas las personas que esperan a sus pacientes, al igual de agradecer a los médicos, enfermeros y personal de salud por su enorme labor que realizan día con día.
Mencionó que al ver a las personas al comerse el platillo de la reliquia con tanto gusto, ella se llenó de emoción y añadió que pudo hacer que se ahorran un peso en la comida, pero las personas que no habían comido pudieron degustar de algo rico y agarrar energías para seguir con el trayecto largo que es esperar el alta de sus enfermos.
María dijo que la fe mueve fronteras, cuando uno pide a Dios con fe, todo se le concede, agradeció a su santo y a Dios por permitirle llegar con sus hijos a este su lugar que representó para ella muchos sacrificios, pero ahora devuelve la alegría que ella sintió por tener a sus hijos en casa sanos y a salvo.
CALE