La madera se apila en su casa y el trabajo, dice, nunca se acaba. Su nombre es Rutilo Reyes y antaño transitó literalmente por todas las vialidades en la república mexicana porque se dedicaba a transportar cargamentos en su tráiler.
Tras el aislamiento por motivo del Covid, Rutilo soltó el volante y permaneció con su familia. Y fue así como también pensó en poner una pequeña carpintería que hoy en día se mantiene y con la cual continúa siendo el sostén de su esposa y de sus hijos.
- Te recomendamos Entregan reconocimiento a hijos de Vita Uva en Moorelear, "un honor caracterizarme como él" Estados
“Este es mi negocio y lo comencé cuando empezó la pandemia. Yo perdí mi trabajo, trabajaba como operador foráneo. Mi señora comenzó a traer tarimas de donde ella trabaja y de ahí comenzamos a hacer banquitos y mesitas y pues a la fecha no hemos parado”.
Ubicado en Canal del sur 162 en Quintas del Nazas, a don Rutilo le han pedido de todo; mesas, maceteros, puertas, cocinetas y closets . No se queja porque la pandemia fue para él una oportunidad. En ese tiempo comenzó a recibir muchos pedidos de escritorios pequeños porque los niños necesitaban estudiar en casa. Pero al pasar la contingencia sanitaria, los trabajos no disminuyeron, esto le ha permitido estar más cercano a su familia.
“En la pandemia estuvieron con las clases en línea y hubo mucha demanda en los escritorios para la escuela, para poner su computadora y todo. Yo tenía como treinta años de trailero y deseaba un trabajo estable, estar en la casa todos los días porque la mayor parte de la vida me la pasé en la calle, en las carreteras, y así recorrí toda la república mexicana, pero era pura calle, hasta dos o tres meses sin venir".
“Nunca pensé que sería carpintero, más bien siempre me ha gustado la carpintería pero lo veía como un entretenimiento, me ponía a hacer banquitas y mesitas y ya me iba de viaje otra vez, pero se vendían. Al principio hacía cosas más rústicas pero ahora hacemos lo que pida el cliente”.
Debido a que tiene claro que las casas que promueve el Infonavit son muy pequeñas, poco a poco se especializó en muebles para espacios reducidos. Los costos de sus muebles resultan económicos porque, además de las dimensiones, se trata de madera reciclable, lo que aún permite tener un producto sólido, alejado de las mercancías aglomeradas que se venden en tiendas departamentales.
“A mí me gustan que estén macizos los muebles, yo cuando compraba muebles me gustaba que estuvieran macizos y ahora los hago así. Aquí hacemos también cosas chiquitas como las repisas y los maceteros que los hacemos al gusto de la gente. Sale para la papa, de repente sí sale, de repente no, pero el trabajo no falta”.
arg