Un vigilante que cuidaba el fraccionamiento Villa Romana de Torreón, fue golpeado severamente, por un vecino del mismo sector habitacional, ya que el guardia supuestamente le había dicho cosas indebidas a su esposa y a su hija.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo alrededor de las 02:40 de la mañana, adentro de la caseta del mismo fraccionamiento.
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Una cámara de video instalada adentro de la caseta, se observa como el vecino golpea fuertemente puerta metálica y logra abrirla para luego golpear al vigilante, quien estaba sentado y dormido.
El vigilante que responde al nombre de Alberto Luna, de 51 años de edad, interpuso la denuncia penal correspondiente, ante la agencia del Ministerio Público de la Fiscalía General de Coahuila, en contra del agresor, por el delito de lesiones calificadas y amenazas.
¿Por qué el vigilante estaba dormido?
El abogado defensor de Alberto Luna, explicó que el vigilante presta sus servicios en una empresa de seguridad privada y él no está asignado a la vigilancia del fraccionamiento Villa Romana.
Expuso que Luna había terminado su jornada laboral en otro fraccionamiento y su jefe inmediato, le solicitó que cubriera el turno de un compañero que vigila ese sector habitacional. Enfatizó cubrió una jornada de 24 horas, de ahí su agotamiento, por lo que se quedó dormido en la silla.
El celular personal de Luna, se quedó encendido sobre la mesa y con una aplicación del TikTok abierta, cuya plataforma digital reproducía un video al parecer "chusco".
Mujeres habrían escuchado el video por el comunicador
Mientras que la bocina del comunicador externo estaba descolgada y fue en ese momento que llegó la hija y la esposa del agresor, abordo de un vehículo.
Afirmó que lo que escucharon ellas fue el audio de la aplicación del TikTok, más no la voz del vigilante.
Mencionó que está confusión fue lo que molestó al agresor y seguidamente fue a buscar al vigilante para golpearlo, en compañía de otro vecino.
Además, señaló que hay un video que muestra que el vigilante nunca le dijo nada a la esposa del agresor, ya que la imagen cuenta con audio.
Por último, añadió que nunca metió las manos para defenderse, situación que fue alevosa y ventajosa por parte del supuesto ofendido y argumentó que el agresor le ocasionó una lesión en el oído derecho que le podría traer secuelas permanentes.
aarp