Son cinco años de búsquedas incansables de sus familiares ausentes. Desde enero de 2015, los fines de semana, de quienes conforman Grupo Vida, los usan para acudir a las fosas clandestinas ubicadas en distintos puntos de la región lagunera.
Hincados, ante la tierra con altas temperaturas, frío, sol y tolvaneras, buscan, escarbaron hasta con las manos, ahora ya con palas e instrumentos más sofisticados, para localizar restos humanos, pues esperan que finalmente, una familia, tenga la certidumbre de saber dónde se encuentra su ser querido.
Todos en el fondo se rehúsan a que sea su esposo, hermano, padre, hija, nieta, la esperanza de encontrarlos con vida se mantendrá encendida hasta el último día de sus vidas.
Como agrupación también realizan acciones medulares que les ha permitido adquirir conocimiento en el tema, mismo que comparten en donde les solicitan, ya sea en el país o en el extranjero.
¿Qué es Grupo Vida?
Un grupo de personas con un común denominador: un familiar ausente, por lo que decidieron unirse para conformar el colectivo 'Víctimas por sus Derechos en Acción -Vida'. Primero, cada sábado, luego se añadieron más días a la semana.
Levantarse temprano, en el verano, con el termómetro que rebasa hasta los 45 grados en el exterior, o en invierno, en las bajas temperaturas, las fuertes tolvaneras. Las fosas clandestinas, generalmente se encuentran en medio de la nada, no hay ni árboles para poder descansar, tomar fuerza y seguir, la fuerza se la dan entre ellos mismos, con sus palabras se empujan el uno al otro, se dan aliento.
El dolor nunca se va pero intentan seguir viviendo, intentan levantarse de la cama para buscar a su familiar, intentan llevar una vida lo más “normal” que se pueda si eso es posible. Ellos se preguntan, ¿cómo se puede volver a vivir, cuando te arrebatan a tu hijo, al padre de familia, a la madre, al único sostén del hogar o a tu esposo?
Ella es Silvia Ortiz, vocera de Grupo Vida
Silvia Ortiz, vocera del Grupo Vida, señala que existe la esperanza de encontrar a sus desaparecidos vivos, pero hay "una realidad que duele", hay quienes dicen que van a encontrar a sus familiares ya muertos.
¿Cómo nace Grupo Vida?
'Laguneros por la paz' realizó una conferencia para dar a conocer lo que era la Ley General de Víctimas, ahí nos conocimos ocho personas, a los ocho días éramos 13 y así fue creciendo hasta llegar hasta los 200 que se tiene actualmente.
"A la entonces Procuraduría General de Justicia en el Estado le informamos que iniciaríamos las búsquedas, no nos creyeron y nos juzgaron locos. Cuando se dan cuenta se sacan de onda y nos dicen que no podríamos ir solos y les respondimos que saldríamos, pero también hemos hecho otras labores innovando en el país".
Tras cinco años de conformarse, ¿dónde están parados ahora?
Estamos parados en medio de muchas fosas en donde se está trabajando para la recuperación de restos, en medio de muchos restos recuperados y guardados porque no han podido determinar los dictámenes, por lo tanto, no se pueden ir a identificación, esto genera un sentimiento de coraje enorme porque no se vale que Grupo Vida trabaje y se mantenga el rezago, creo que hasta dos años.
¿Cómo nacen las búsquedas?
Yo traía la inquietud desde hace años, desde que mi hija desapareció, y con el tema de Iguala es que llego con los integrantes del grupo a proponerles y me contestaron que sí y así comenzó todo.
La primera búsqueda la hicimos casi solos, con elementos de la Policía Federal con un binomio pero sin entonces la Procuraduría.
Me preguntaron qué íbamos a hacer y no es que tuviera mucha experiencia, solo fui a una y pues lo poco que aprendí lo puse en práctica y así comenzó todo. Aprendimos todos paso a paso en 2015.
¿Qué esperan de las búsquedas?
Las familias de personas que se encuentran desaparecidas, lo que más deseamos es encontrarlos en vida, todos, no digo quien no, pero cada día que nos enteramos de situaciones y como buscadores lo que estamos encontrando, hay personas que dicen: voy a encontrar a mi hermano, a mi esposo, hijo muerto.
Eso es lo que dicen ya las familias, pero también dicen, "ya quiero encontrarlo". No se ha perdido la fe, eso nunca, pero hay una realidad que duele y existe dentro de todos nosotros.
¿Cómo repercutió en su entorno familiar y cómo se sobrelleva una situación así?
Las mamás que conozco en todo el país, que somos buscadoras, tenemos un nivel más alto de resistencia por así decirlo. El tema del descuido familiar, se vienen complicaciones con los presentes por los ausentes. De verdad es una lucha de la familia por encontrar y tratar de sobrellevar lo mejor que se pueda.
Hay una dualidad ya que estar en esta lucha es lo que nos mantiene fuertes y con ganas de seguir, es decir, tengo que encontrarlos, pero tengo que atender a los que están aquí.
¿Las metas de corto, mediano o largo plazo?
El objetivo principal es seguir buscando para encontrar, pero el segundo punto más importante es lograr que se genere la base de datos de desaparecidos, la de hallazgos y de indicios para que sepamos a quién estamos encontrando ya que, todas estamos sacando mucho y a la mera hora ¿quiénes son? pues quien sabe. La identificación es por lo que vamos.
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