Heriberto Olivas, con 36 años frente al puesto que heredó de su padre Rafael Olivas, quien fue uno de los fundadores del Mercadito Navideño de Torreón, afirma que el giro principal de su negocio es la reparación de series.
“Aquí con nosotros la venta de foquitos navideños no es lo fuerte y para que la gente economice, los invitamos a que no tiren su series, mejor que las traiga a reparar, el costo va de acuerdo al daño, pero por lo regular, se ahorran hasta un 60 por ciento de comprar una serie nueva”.
El trabajo que realiza Heriberto es reconocido porque además de que lo hace bien, también les ofrece garantía, lo que en otros negocios no podrán encontrar, situación que lo hace uno de los preferidos.
Bajo el nombre de Reparaciones y Ventas Olivas, este puesto se ubica en el exterior del mercadito, sobre la avenida Hidalgo y la Idelfonso Fuentes, donde él personalmente atiende a sus clientes y donde también cuenta con el apoyo de Petronilo, otro integrante de la familia.
Expresó que con el paso del tiempo todo ha ido cambiando y en la cuestión de este tipo de artículos también, pues cada vez las series son de menor calidad, casi desechables, pero aun así tienen remedio.
Es la razón por lo cual muchas personas tienen en mente que poner un nacimiento o adornar un arbolito de navidad es muy costoso, “es que por lo general compras una serie y al año siguiente hayque tirarlas, aunque si lo hace la gente, pero la buena noticia es que aquí las reparamos”.
Informó que esa fue la idea de su papá, que la gente pudiera economizar y que también conservará sus luces navideñas, sobre todo, aquellas muy singulares por su diseño y que ahora no se encuentran.
“Se acuerda de las series con forma de piñas, pues esas son muy antiguas, pero ya eso todo desapareció y aunque no me lo crea, yo ya tengo años en este oficio, pero me traen series de ese tipo, porque entre más antigua, una serie es de mayor calidad, es que de antemano, son más resistentes”.
El afirma que atiende a mucha gente que iba con su papá, “y la verdad, aquí vengo no solo a sacar dinero, vengo a seguir la tradición que mi papá nos dejó”.
Y hablando de dinero, expuso que aunque ya no es lo mismo en comparación a años anteriores, cuando muchas personas llevaban sus series a reparar, este negocio todavía le deja ganancia.
“La pandemia nos afectó a todos, del año 2020 a 2021, nada más estuvimos 20 días, pero gracias a Dios ahí la llevamos, pero claro que no es como antes, pues las series de antaño eran otra cosa, para empezar, el cable era grueso, bastante resistente, ahora a primera vista se sabe si los focos son chinos o americanos, antiguos o modernos”.
Dice que el negocio este año ha bajado un poco, “es por lo mismo, la gente mejor prefiere cambiar de luces navideñas cada año, pero les digo que aún éstas que son muy comerciales, me refiero a las americanas no a las chinas -ya que estás son de cable muy delgado-, sí podemos repararlas aquí, por lo que los invitamos a que nos las traigan y ahorren un poco de dinero.
EGO