Paciente de covid-19 recuperado narra su experiencia en el hospital

José Manuel Riverol duró 10 días internado con una neumonía severá en la clínica 71 del IMSS en Torreón, “entiendo a la gente que quiere salir corriendo”.

José Manuel Riverol, médico pediatra del Hospital General de Torreón en el área de urgencias y hospitalización. (Mauricio Román)
Brenda Alcalá
Torreón, Coahuila /

Tras diez días de internamiento en la clínica 71 del IMSS, con el diagnóstico de neumonía severa por covid-19, José Manuel Riverol, médico pediatra del Hospital General de Torreón en el área de urgencias y hospitalización, comparte su vivencia en el aislamiento y entiende la afectación que les genera emocionalmente en algunos la enfermedad, a grado tal de querer salir corriendo del tratamiento

También es dirigente sindical de la sección 87 de la Secretaría Nacional de Trabajadores del Sector Salud Región Laguna y comparte que, se contagió al realizar gestiones a favor de tres compañeras de él que eran sospechosas y asintomáticas y no se les autorizaba el aislamiento.

“Sé perfectamente el momento en el que me contagie. Portaba yo tapabocas y mis compañeras positivas también, pero estuvimos en un espacio cerrado por más de dos horas. Las medidas de protección frente a un paciente se toman, creo que cuando se trata de compañeros se relaja un poco en la convivencia natural, también hubo errores en la logística de atención al programa covid en el Hospital, ya que tendrían que haberles autorizado los del área de epidemiología, la cuarentena desde el momento en el que se convierten en sospechosos pero no fue así”, señala.

Comparte que desde hace tres años que se encontraba comisionado en la dirigencia sindical por la naturaleza propia de la representatividad, sin embargo el 19 de marzo de 2020 se incorpora al área de urgencias, por las ausencias de los compañeros que forman parte de la población vulnerable que debieron ausentarse tras el decreto estatal.

“Yo estoy seguro de no haber contagiado a nadie en el Hospital y en la consulta, ya que las medidas que se toman en las atenciones a los pacientes son extremas. En la casa sí se contagió mi esposa y mi hijo ya que es donde uno se quita el tapabocas y baja la guardia. A tres días de la convivencia con mis compañeras positivas me aparecieron síntomas entre ellas fiebre durante seis días, se me presentó la saturación de oxígeno en la sangre, pero dificultad respiratoria tuve al estar en el hospital, a donde acudí a tomarme una radiografía en donde me apareció la neumonía grave, yo vi las placas y se veían muy comprometidos mis dos pulmones”, afirmó.

¿Qué sintió en el momento en el que le dijeron que lo iban a hospitalizar? 

Son sensaciones que solo las personas que hemos pasado por eso la podemos describir. Como médico sabemos lo que puede pasar y eso genera más angustia. Se cierran las puertas tras de nosotros, y desconocemos si podremos verlas que se abran.

¿Cómo describiría el proceso una vez ya internado?

Como un verdadero calvario, una experiencia sumamente dramática. Estuve internado en la clínica 71 en el piso 7 hasta donde me trasladaron en una cama-cápsula, solo veía al personal una vez por turno, no puedes platicar con nadie porque no tenía compañeros además no había aire acondicionado y los rayos del sol pegaban totalmente. Las necesidades fisiológicas se realizan en un cómodo, no hay un WC, ni regadera, no te puedes bañar. Los protocolos se deben de cumplir

“Durante mi traslado, atrás de donde va pasando la cápsula va una persona fumigando, adelante otra, abriendo camino para seguir la ruta trazada para pacientes covid 19. Yo sí me explico, lo que pueden sentir las personas que han intentado o han huido de los tratamientos, porque si yo, con todo el conocimiento, sabiendo que mi estado de gravedad era fuerte, estuve a punto de claudicar, me puedo imaginar lo que sienten los que quieren salir corriendo o los que lo han hecho”, afirmó.

Fueron diez días de tratamientos pero también del tiempo para pensar en muchas cosas, mi familia sabía de mi estado de gravedad a través de llamadas telefónicas pero también ellos estaban en cuarentena por ser positivos.

Reconoce al personal médico y de enfermería quienes hicieron su trabajo y supo que estuvieron a punto de intubarlo pero ya cuando pasó todo. Gracias a su evolución le dieron su alta para continuar su tratamiento en el domicilio, dice que no puede siquiera describir con palabras la oportunidad que sintió le ha dado de nuevo la vida.

Comparte su historia para pedirle a quien lo lee que se cuiden, que tomen las precauciones necesarias y si se puede exagerar en ellas para disminuir la cantidad de contagios por este virus por que no quisiera jamás pasar por una situación como la que vivió en su lucha contra el covid-19.

CALE

LAS MÁS VISTAS