Con el objetivo de mantener vigente la tradición de pedir posadas, vecinos de Quinta La Merced en Torreón, realizaron este martes la clausura de las mismas con bendición sacerdotal, rosario, cena y show infantil.
Una vez que diciembre llega, trae consigo una energía especial, más allá de las luces que adornan las ciudades, hay tradiciones que unen y dan identidad, entre todas ellas, las posadas son las que ocupan un lugar central en el corazón de la temporada, aunque desafortunadamente muchos las han dejado en el olvido.
La palabra "posada" para algunos es sinónimo de fiesta, amigos y comida deliciosa, pero en su esencia, es una celebración con una historia rica y un profundo significado de comunidad y perseverancia.
El corazón simbólico de las posadas es la representación del peregrinaje de María y José desde Nazareth hasta Belén durante nueve noches, del 16 al 24 de diciembre, que simboliza la búsqueda de un lugar donde alojarse, una "posada".
Es por esto que los vecinos de Quinta La Merced, por séptimo año consecutivo, se reúnen para celebrar esta tradición decembrina.
Los vecinos
Manuel García Guerrero y Ana Grimaldo, son los encargados de convocar a las familias para pedir posada en las viviendas de ocho familias, para luego disfrutar de deliciosos antojitos como tamales, buñuelos, ponche y champurrado, entre otros más, siendo este 23 de diciembre la última de la temporada, ya que el 24 de Nochebuena, cada familia convive en sus respectivos hogares.
La noche del martes, más de 50 adultos, jóvenes y niños recorrieron del último hogar rumbo a la plaza de la cerrada para entonar las clásicas posaditas, para después recibir la bendición del padre Jaime Fernando Zapata Ortega, párroco de San Martín de Porres, para posteriormente rezar el Santo Rosario y finalmente disfrutar de una rica cena en familia y de un show infantil.
"Esta tradición es muy bonita y en esta comunidad me sorprende mucho la cantidad de niños y jovencitos que están aquí rezando el rosario y de las familias también me parece algo muy bello, es cierto, se ha perdido mucho esta tradición pero con estos niños me lleno de esperanza, se puede rescatar, puede haber en muchas personas estas bellas tradiciones, esta fraternidad, esta alegría, este compartir, este orar juntos en bien de todas nuestras familias", expresó el sacerdote.
Finalmente el padre Jaime Fernando, compartió el siguiente mensaje: "A todos les deseo con todo mi corazón que en esta solemnidad de la natividad del Señor, les traiga desde el cielo todas las bendiciones que necesitamos en nuestras familias, comunidades y nuestros corazones, que el Señor les llene de alegría a todos, y cada vez en nuestra tierra crezca más la fe, la esperanza, la caridad y la fraternidad entre todos nosotros, a todos les mando un abrazo y les deseo muy feliz natividad del Señor".
arg