Inició este fin de semana el operativo de revisión de la calidad de las bebidas embriagantes que se expenden en los bares y restaurantes.
César Alvarado Mendoza coordinador del Control de Padrones de la Secretaría Finanzas aseguró que, les llegó el refractómetro que permite conocer los grados de alcohol. Además, también se revisa que las botellas correspondan a los contenidos.
Explica que a pesar de que no tienen denuncias sobre alcohol adulterado en algún establecimiento, se ha detectado durante las inspecciones que se realizan en los distintos centros de consumo, se han detectado jóvenes que presentan muestras de haber consumido alcohol en un nivel en el que no se pueden ni mantener de pie; lo mismo se observa entre los que han participado en peleas registradas en Colón o Morelos, de ahí que solicitaran el densímetro para alcohol.
“Por paseo Colón sobre todo se observan a jóvenes demasiado tomados. Se puede entender hasta cierto punto que sea por un elevado consumo, sin embargo, no es muy común verlos en un extremo por ello es que se solicitó este aparato para medir el alcohol que contienen las botellas de estos centros de consumo. Se han registrado riñas, se advierten jóvenes y jovencitas después de las 2:00 am muy, muy alcoholizados y dijimos vamos a ver qué es lo que está pasando”.
La Ley para la Regulación de Venta y Consumo de alcohol en el estado de Coahuila, menciona que alterar, contaminar o adulterar las bebidas alcohólicas para su venta, expendio o consumo bajo las consideraciones establecidas en los artículos 206, 207 y 208 de la Ley General de Salud amerita la clausura, multa o revocación de licencia a los propietarios y operadores de los establecimientos que sean sorprendidos vendiendo bebidas alcohólicas adulteradas, contaminadas o alteradas.
Finalmente dijo que si bien durante el primer fin de semana no se han encontrado irregularidades, continuarán los operativos en los distintos sitios donde se expende alcohol.
aarp