Turistas y locales siguen llegando a las playas de Mazatlán, Sinaloa, la mayoría usando cubrebocas, y atendiendo los protocolos sanitarios, los cuales han sido intensificando, pues la entidad hoy amaneció con 512 casos activos de covid-19, mientras que la actividad turística se mantiene con inestabilidad económica.
A sus 80 años, don Pedro Rodríguez, quien es vendedor en las playas, desde temprano acude a ofrecer su mercancía a los turistas, donde destacan las pulseras tejidas, sin embargo, reporta que sus ventas han bajado.
“Ahorita malo: no quiere comprar la gente, porque no traen dinero, tiene rato que bajó”, dijo.
Al día vende cinco o seis pulseras a 25 y 30 pesos cada una. Su paso es lento y su mirada triste, él ya se está vacunado con las dos dosis, pero hace menos de quince días la pandemia enlutó a su familia.
“Se me murieron mi hija y mi yerno de covid, ahorita andamos tristes, fuimos a verlos (para despedirse de ellos); no nos dejaron verlos”, lamentó.
Con su dolor a cuesta este hombre de la tercera edad sigue saliendo a vender a la playa.
“Hasta donde aguanto, tres o cuatro horas, cuando estoy cansado ya me voy, a veces sin ganar nada, saco para mis tortillitas con eso me conformo y ya me voy”, expresa y sigue adelante, trae su cubrebocas y gel antibacterial para regresar a casa.
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Entre tanto, turistas y locales siguen llegando a la playa, el dirigente de los vendedores ambulantes de la Zona Federal Marítimo Terrestre, Jorge Luis Ríos Rubio, dijo que acatarán las recomendaciones que emiten las autoridades ante esta emergencia sanitaria, traer cubrebocas y no ofrecer productos a los turistas después de las 20 horas.
“El vendedor que ande en playa a las ocho de la noche lo van a desalojar”, indicó.
Por su parte, las autoridades municipales se reunieron esta mañana con representantes del sector comercial, turístico, empresarial y restaurantero del puerto, se informó el reforzamiento del operativo Nueva Normalidad con aforos del 45 por ciento en comercios y restaurantes, así como en áreas de uso común de hoteles.
Además se determinó reforzar los filtros de ingreso a los establecimientos, la desinfección de las instalaciones, incluyendo baño, bodegas, almacenes y todo aquel espacio donde se tenga convivencia o interacción, previo a la apertura y al cierre del lugar.
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En el caso de los restaurantes, el coordinador de Protección Civil municipal, Eloy Ruiz Gastélum, destacó que los clientes podrán retirarse el cubrebocas una vez que se les hayan servido los alimentos o bebidas, y al terminar de consumir los alimentos, los meseros o encargados de los restaurantes deberán de solicitar la colocación del mismo.
KT