“Un político no sabe hablar en serio sobre sexualidad”

Los legisladores no tienen una comprensión amplia y adecuada de la sexualidad, por lo que son renuentes a discutir el tema de la diversidad, señala el experto que visitó la ciudad para preparar el Congreso Nacional de Educación Sexual y Sexología.

Los derechos humanos son la base de nuestra convivencia, destacó Luis Perelman.
Syndy García
Monterrey /

Como especialista en sexología, Luis Perelman Javnozon, presidente de la Federación Mexicana de Educación Sexual y Sexología, arriba a Monterrey para hablar de temas "incómodos" para muchos.

El especialista en sexología educativa y quien ha trabajado por años con niños y niñas respecto a sus comportamiento de géneros discordantes, arribó a Nuevo León para realizar los preparativos del X Congreso Nacional de Educación Sexual y Sexología, el cual se llevará a cabo del 12 al 14 de noviembre.

En su paso por la ciudad, el especialista habla para MILENIO Monterrey sobre cuáles son las principales problemáticas que se presentan en materia de discusiones en los recintos legislativos del país, especialmente en la región del norte de México, donde se han presentado altas tasas de discriminación hacia los homosexuales.

Perelman Javnozon expresa su punto de vista sobre la diversidad, los matrimonios igualitarios y el porqué los legisladores no llevan la palabra sexualidad a las discusiones del Pleno, donde la educación machista sigue influyendo en un país que se dice laico.

En materia de políticas públicas, ¿qué ha faltado para que en Nuevo León los legisladores discutan temas sobre diversidad, discriminación y matrimonio igualitario?

En general los políticos no saben hablar de sexualidad y esa es una de las bases. Hay que poder tener una comprensión amplia y hablar de sexualidad con esta naturalidad.
No tenemos la educación adecuada para que nos tomen en serio, entonces un político o no sabe hablar en serio de temas de sexualidad, o les da miedo, o si alguien empieza los demás le van a hacer burla, eso es lo más común también.

Al mismo tiempo nos regresamos a los extremos muy fácilmente, porque es de donde venimos y a la educación principal machista, reproductista, que odia la diversidad, homofóbica y transfóbica, misógina, esa es todavía nuestra base.

Algunos diputados han señalado que los principios de sus respectivos partidos no les permiten legislar sobre ciertos temas como el matrimonio igualitario, ¿qué piensas de ello?

Ya no es asunto de partidos, ya hay un acuerdo nacional, está en la Constitución. El laicismo es también la base de la convivencia, si van a entrar nuestras convicciones personales y de fe antes, primero va haber mucha controversia de ¿a cuál le vas a hacer caso?, a la de los pentecostales, a los de los mormones, a los de los testigos de Jehová, a los judíos, ¿a los ortodoxos o a los conservadores?, ¿a los católicos o a los musulmanes?, por eso es un país laico, los derechos humanos son la base de nuestra convivencia y es la consideración principal.

Nuestras consideraciones personales son para nuestra vida personal, ese es el debate hoy en varios países. Ya también hemos visto que en este proceso cada vez más países y Estados están reconociendo la diversidad.

¿Por qué crees que el matrimonio igualitario no se legisla en los estados cuando ya la Suprema Corte de Justicia abrió las puertas para ello?

En México la discusión ya está cerrada, a nivel federal, a nivel de la Constitución la Suprema Corte, ya es en automático que van a dar los amparos, entonces quien se quiera casar lo va a conseguir.

El asunto es que por estas ideologías y convicciones hay detenidos varios procesos. Mientras se siga considerando que las personas gays y lesbianas son los malvados, pese a que quieren poder expresar su relación reconocida por el Estado, así seguirá.

Actualmente existe gente como antes que pensaban que si la mujer votaba se iba a acabar el mundo, si tenía el derecho al voto se iba a acabar el mundo, si dejaban entrar a este país a gente que fuera de otras religiones, pero hay una noticia, no se ha acabado el mundo por eso.

¿Ha faltado información para que los diputados discutan temas sobre la diversidad?

El asunto es que es como lo aprendimos y eso es lo que nos ha inculcado el miedo. Tenemos que verlo de cerca, tenemos que conocer a alguien cercano y está sucediendo.

Familiares, compañeros de trabajo, compañeros de la comunidad religiosa, en las escuelas y entonces verlo de cerca y es gente que apreciamos, gente que son modelos positivos, eso es lo que en el fondo va a ayudar que ese no es el problema, que al contrario tenemos que celebrar la diversidad para que cada quien esté a gusto con quien es, esa es la base para poder establecer relaciones saludables.

Si yo me odio, si yo estoy en la cama con alguien que no me gusta, si me fuerzan a vestirme de una forma con la que me siento a gusto a con la que me identifico, si no les dicen a las personas transgénero, transexuales, a las que así se sienten y no reconocen esa dignidad básica de que mi ser es femenino y no me puedes llamar por como yo me siento, eso es muy ofensivo. Me estás diciendo "yo no existo y no tienes derecho a existir", esas son necesidades básicas de aprecio, eso ya está sucediendo en México pero todavía falta mucho y es necesario trabajar en el conocimiento de los temas.

¿Cuál es el mensaje por parte de los especialistas a los diputados y a la sociedad para tratar temas de diversidad?

El mensaje es aprendamos a reconocer la diversidad, aprendamos a respetarnos, aprendamos a evitar el odio, la violencia, sin discriminación.

LAS MÁS VISTAS