Habitantes de la comunidad de Campo Grande, en el municipio de Ixtaczoquitlán, Veracruz, retuvieron ayer a tres policías municipales durante varias horas. Los oficiales presuntamente habían extorsionado a una mujer y a su hijo, quienes cortaron un árbol en un predio ejidal
Los policías pidieron a las supuestas víctimas que mostraran el permiso correspondiente o, en su lugar, que les dieran dinero para dejarlos en paz.
Las personas empezaron a gritar y llamaron a los vecinos, que llegaron de inmediato.
Los policías habrían lanzado disparos al aire para ahuyentar a la turba, pero fueron desarmados. Habitantes les quitaron la patrulla, radios y celulares.
La mujer y su hijo dijeron a sus vecinos que los policías los acusaron de ser taladores y supuestamente les pidieron dinero para no detenerlos. Les habrían entregado 400 pesos.
Más de 50 personas llegaron al sitio donde estaban los policías y se los llevaron a la agencia municipal. Al sitio acudió el comandante de la policía municipal, Luis Pineda, con policías estatales.
El oficial habló con los afectados y escuchó las acusaciones sobre los policías, quienes fueron señalados de haber cometido este tipo de actos en otras ocasiones.
La presunta taladora fue llevada con un médico, pues se sintió mal de salud por lo ocurrido.
Fue hasta entrada la noche que los policías fueron entregados por la gente, con la promesa del director de la Policía Municipal de que serían destituidos.
ROA