Visitantes del cementerio general de Mérida, se quejaron de las condiciones de abandono y falta de mantenimiento por parte del ayuntamiento, pues consideraran que debe ser un camposanto en condiciones.
Aunque el reglamento dice que la limpieza, mantenimiento y conservación de las bóvedas, osarios, criptas y mausoleos será obligación de los titulares del derecho de uso, debe ser la autoridad municipal quien de mantenimiento a las áreas e instalaciones de uso común.
“Ya está muy abandonado el camposanto, pues la verdad todos pagan impuestos, hasta ellos, muertos pagan impuestos, porque se paga todo esto, entonces que le ponga más atención”, explicó Cecilia González, quien acudió a dejar flores a sus abuelos y padres, junto con su hermana Carmita, este Día de Muertos.
Las hermanas solicitan al ayuntamiento que coloque más tomas de agua, pues ahora hay pocas en funcionamiento, se barra el lugar, recojan las ramas de árboles secas, coloque señalamientos de peligro en tumbas abiertas, entre otras medidas de seguridad.
El campo santo tiene repartidos 25 mil “hogares” entre bóvedas, osarios y mausoleos, pero en la parte sur, pareciera una zona destruida de manera intencional.
Si bien, hay tumbas que datan de casi 200 años, y toda la familia ya falleció, a las autoridades municipales les corresponde mantener seguras y presentables todas las áreas del cementerio. Además, tiene la distinción de Patrimonio Material por sus obras arquitectónicas, sus esculturas y artes decorativas.
VJHM