En la zona conurbada aún existe pobreza a pesar del desarrollo de sus municipios y la recuperación de su economía, estimándose que hay 263 mil 191 personas en esta condición, de acuerdo con un reporte de la Secretaría de Bienestar Social federal.
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El más reciente Informe Anual sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social, publicado en el pasado mes de enero, refiere que en Tampico, Madero y Altamira, habitan minorías con carencias de alimentación nutritiva y de calidad, espacios y servicios básicos de vivienda, acceso a servicios de salud, seguridad social y educación.
Precisa que el municipio con más necesidades sociales es Altamira, el cual tiene una población total de 264 mil 477 habitantes según estimaciones de Conapo, y de estos, 123 mil 363 se encuentran en alguna dimensión de pobreza, el 42.1%.
La mayoría presenta pobreza moderada y suma 107 mil 056 personas, el 36.6% de la población, mientras en la extrema son 16 mil 307 habitantes y constituyen el 5.6%, según el reporte de la dependencia federal.
Tampico a su vez, tiene una población de 342 mil 624 ciudadanos, de los que 89 mil 907 registran pobreza, el 28.8%. Es en grado moderado para 83 mil 275 personas y extremo en 6 mil 632, equivalentes a 26.6% y 2.1% respectivamente. Ciudad Madero cuenta con 229 mil 226 residentes, de los que enfrentan pobreza 49 mil 921, el 23.4%. Con clasificación moderada hay 45 mil 032 habitantes, el 21.1% y en extrema 4 mil 889, el 2.3%.
En este contexto, el puerto industrial de Altamira integra 123 mil 363 personas en pobreza; Tampico 89 mil 907 y el municipio de Madero 49 mil 921, cuyos porcentajes son de 42.1%, 28.8% y 23.4%, respectivamente.
Sectores vulnerables
Uno de los rostros de la pobreza es la necesidad social en materia de salud, afirmó Moisés Méndez Aguilar, activista de la asociación civil Jóvenes de Corazón Grande, que apoya con medicamentos y despensa a población vulnerable y lleva alimentos a familiares de pacientes internados en hospitales de la zona.
“Las personas que más resienten la pobreza son aquellas desempleadas, sin un salario fijo o que viven al día con un mínimo y con eso tienen que atender todas las necesidades de su familia, principalmente alimentación y salud, obviamente no les alcanza, cuando se enferman van a hospitales de gobierno, pero luego no hay medicamentos y los tienen que conseguir”.
La agrupación de jóvenes distribuye canasta básica, verduras y agua purificada entre familias de escasos recursos económicos y aparatos como andadores en apoyo a los adultos mayores.
“Los apoyos sociales del gobierno y despensas sí ayudan, pero son insuficientes; no alcanzan, por ejemplo el programa del 65 Y Más, es un promedio de 100 pesos diarios, porque llega cada dos meses”, expuso Méndez Aguilar.
Cada 17 de octubre, se conmemora el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, una jornada destinada a visibilizar la lucha contra este flagelo y promover la dignidad humana entre la comunidad en general.