Airbnb, la plataforma de alojamiento fundada sobre la promesa de un lugar barato para dormir en cuartos de huéspedes y camas inflables, entra en el mundo del lujo, ofreciendo propiedades para alquilar hasta por 1 millón de dólares por semana.
La compañía lanza la submarca “Airbnb Luxe”, con 2,000 lugares de lujo para alquilar en todo el mundo. Incluye villas frente al mar en el Caribe, castillos franceses y casas históricas de la Toscana, así como grandes departamentos en ciudades estadounidenses y europeas. El Airbnb más caro de la lista es Nukutepipi, un atolón privado en la Polinesia francesa que tiene capacidad para 52 personas y que cuenta con personal que incluye chefs, amas de llaves, masajistas y maestros de buceo.
Las tarifas para las propiedades de Airbnb Luxe tendrán un promedio de alrededor de 2,000 dólares por noche, en comparación con el precio de 150 dólares para las ofertas de “Plus”, la designación que el sitio le da actualmente a los alquileres más caros.
“Este es el siguiente nivel que era necesario para poder cumplir con nuestro modelo de ‘cualquiera pertenece a cualquier parte’”, dice Nick Guezen, director de estrategia de cartera de Airbnb. “Hay vacacionistas de lujo que no quieren quedarse en una habitación compartida o en una de las propiedades más pequeñas del sitio; esto les presenta una oferta para que cualquiera pueda viajar con Airbnb”.
La plataforma se creó en 2008 cuando Brian Chesky y Joe Gebbia inflaron tres camas de aire en la sala de su departamento de San Francisco. Rápidamente se convirtió en un pionero de la “economía compartida”, expandiéndose para ofrecer cuartos de huéspedes y luego departamentos completos. La interacción con el propietario, o “anfitrión”, fue una parte clave de la experiencia, presentada como un conducto para las mejores experiencias locales.
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En los últimos años se ha observado una importante diversificación, y el sitio ofrece cada vez más estancias en alojamientos de vacaciones convencionales: hoteles, bed and breakfast y propiedades comerciales de autoservicio. A principios de este mes, incursionó como operador turístico con lanzamiento de Airbnb Adventures, que ofrece viajes de campamento, senderismo y trekking de varios días. Se esperaba un impulso en el sector de lujo desde que Airbnb adquirió Luxury Retreats, una compañía canadiense de alquiler de vacaciones, en 2017.
Sin embargo, la diversificación ofrece a la compañía protección contra posibles movimientos del gobierno para restringir el alquiler de alojamientos de propiedad privada. La semana pasada, 10 ciudades europeas escribieron a la Unión Europea para exigir más ayuda en la lucha contra el crecimiento de las plataformas de alquiler de corta duración, algo que según ellos hace que los locales no puedan competir en el precio.
La compañía anuncia las propiedades de lujo “cuidadosamente seleccionadas” como “únicas y espectaculares”, diciendo que son “destinos en sí mismas”. Para garantizar que cumplan con el estándar requerido, se evaluaron las fotografías de cada una de ellos con 300 criterios, a lo que le sigue de una visita en persona por parte de consultores independientes que tienen un equipo de 300 personas en todo el mundo.
En la práctica, muchos ya están disponibles a través de otros agentes o directamente. La Fleming Villa en Jamaica, por ejemplo, una de las cinco propiedades seleccionadas por Airbnb para anunciar el lanzamiento, en realidad es parte del complejo turístico GoldenEye y se puede reservar directamente o a través de una amplia gama de operadores turísticos establecidos. Otra, una casa para nueve en Kensington, figura en la plataforma rival One Fine Stay.
A los clientes se les ofrecen servicios adicionales que incluyen traslados al aeropuerto, catering, cuidado de niños y tratamientos de spa, todo con un costo adicional. Un equipo de 25 “diseñadores de viajes” con sede en Montreal estará de guardia para coordinar las solicitudes.
Airbnb informa una creciente demanda para las propiedades de lujo, diciendo que los alquileres que cuestan más de 1 mil dólares por noche aumentaron más de 60 por ciento en 2018 en comparación con el año anterior. Espera duplicar ese número con las ofertas de las listas de Luxe en los próximos 12 a 18 meses, enfocándose particularmente en propiedades urbanas para vacaciones cortas como para viajes de negocios.
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A los clientes se les ofrecen servicios adicionales que incluyen traslados al aeropuerto, catering, cuidado de niños y tratamientos de spa.