Las posadas, poner el nacimiento y romper la piñata son sólo algunos ejemplos de tradiciones representativas de la cultura mexicana que no pueden faltar en Navidad. Sin embargo, existe una no muy popular en el país pero que seguramente conoces: besarse bajo el muérdago.
Se trata de una creencia navideña de la que por lo general se habla en películas y hasta en canciones. Por ejemplo, en la escena final de la primera entrega de Toy Story (1995), Woody y Betty (Bo Peep) se besan bajo esta planta. En Harry Potter y la orden del Fénix (2007), el protagonista y Cho Chang realizan la misma acción. Pero, ¿por qué las personas suelen hacerlo? A continuación te contamos su historia.
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¿Qué es el muérdago?
Es importante mencionar que existen entre mil y mil 500 especies en todo el mundo. Según la revista Muy Interesante, es una planta parcialmente parásita, esto significa que es capaz de realizar su propia fotosíntesis, pero también extrae agua y minerales de troncos y ramas de árboles, nutrientes que por sí sola no puede obtener. De hecho, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) del Gobierno de México advierte que si el crecimiento del muérdago es abundante o permanece durante muchos años sobre las ramas del huésped, puede provocar la muerte del árbol.
Su ciclo de vida inicia inicia cuando las aves consumen su única semilla blanca, carnosa y un tanto viscosa. Si se queda pegada en su pico, los pájaros se frotan en la corteza o ramas de los árboles para despegarla. En caso de tragarla, la defecan y si ésta cae sobre un árbol se adhiere a él, pues sigue siendo pegajosa. En ambos casos, está lista para iniciar su germinación.
¿De dónde surge la tradición de besarse bajo el muérdago?
Aunque en México no está muy arraigado el uso del muérdago en la Navidad, en Estados Unidos, Canadá, Australia y en algunos países en el norte del Reino Unido sí es muy característico. De acuerdo con la histórica revista Smithsonian, la relación entre esta planta y el romance proviene de un mito nórdico que involucra a Baldr, dios de la paz y la luz.
Dicha deidad se despertó una mañana asegurando que su vida corría peligro, pues toda la flora y fauna querían matarlo. Para prevenir la muerte de su hijo, su madre Frigg, diosa del amor y la sabiduría, le ruega a cada planta y animal que no lo dañen. Sin embargo, olvida hablar con el muérdago, por lo que Loki, dios de la traición y la mentira, se aprovecha de la situación, hace una flecha/lanza de muérdago y ayuda a Höðr, el hermano ciego de Baldr, a dispararle a éste último y con ello, matarlo.
Frigg lloró tanto que sus lágrimas formaron las bayas blancas del muérdago. Al ver su dolor, otros dioses resucitaron a Baldr, por lo que ella transformó a la planta de un símbolo de muerte a uno de paz y amor. Desde ese momento, según la mitología nórdica, ordenó que cada vez que se estuviera debajo de un muérdago, las personas se besaran y abrazaran.
A partir del siglo XVIII la historia tomó un enfoque más romántico, el cual poco a poco se fue expandiendo de Europa a América. Un siglo después, los británicos la convirtieron en una tradición navideña en la que las jóvenes tenían que ser besadas bajo esa planta para que tuvieran un amor próspero y apasionado.
En la actualidad se cree que si una pareja se besa debajo del muérdago en Navidad creará una unión más fuerte entre ellos y les traerá suerte en forma de matrimonio o de un embarazo.
CAR