“La filosofía de nosotros es que sean bienvenidos ideológica, sexual y políticamente"

Egresado de la Universidad Complutense de Madrid, regresó a su tierra para probar que las cosas se pueden hacer diferentes. Entre sus planes para este 2020 está el asumir el liderazgo del club Rotaract Valle de San Javier

Gerardo Sosa, joven político. (Carlos Dayan)
Elliott Ruiz
Pachuca /

A los 18 años dejó Pachuca para estudiar en Europa. Al terminar el bachillerato en la Prepa 1, viajó a Londres para certificarse en inglés y después llegar a España, donde hizo un Técnico Superior en Gestión Comercial y Marketing Político en la Universidad Europea de Madrid.

“Eso me dio acceso directo a la Complutense, que es la universidad pública de mayor renombre en España y la más activa políticamente de habla hispana, es una universidad de izquierda”, cuenta. Su disciplina fue premiada al egresar con una matrícula de honor, que le abrió las puertas para una beca en el Colegio de Ciencia y Politología de Madrid.

“Siempre tuve muy claro que me iba a ir con la intención de regresar, para probar que las cosas se pueden hacer diferentes”, dice. Esta travesía de siete años le sirvió a Gerardo para saber cómo incentivar un verdadero cambio en la sociedad.


“Las personas en Europa tienen muchísima madurez. El transporte público es puntual, es perfecto. Me hacía mucha gracia ver que el autobús decía: en dos minutos llega, te asomabas y ahí venía el autobús. Esa cultura es la muestra de lo que puedes lograr si te organizas como sociedad”, comenta.

Cuando necesitó atención médica, no pagó. Su universidad le costó 12 mil pesos al año, en nueve pagos. Todos esos servicios le hicieron pensar que en México es posible, siempre y cuando se hagan bien las cosas y se transparenten.

De vuelta en Pachuca, Gerardo encontró una ciudad con un crecimiento desmedido, donde los jóvenes eran utilizados como tamboreros y perifoneros. “Vi que la juventud estaba ocupada como un brazo, me atrevo a decir hasta violento”, lamenta.

Sosa quería sumarse a un partido político, pero los halló a todos deslegitimados, sin credibilidad; es así como decidió sumarse a la sociedad civil organizada, a través de la asociación Mentes Libres y el Club Rotario Internacional.


LUGAR PARA TODOS

Hace un mes, el club Rotaract, donde se reúnen los jóvenes rotarios, convocó a una elección para seleccionar a un nuevo presidente; junto a dos candidatos más, Gerardo participó y ganó con una diferencia de dos o tres votos.

Con el objetivo de servir a la gente, el presidente electo presentó un plan de trabajo, bajo los métodos ya establecidos por la marca mundial.

Aunque asumirá el cargo hasta junio, Sosa ya ha marcado diferencia: “la filosofía de nosotros es que todos sean bienvenidos ideológica, sexual y políticamente.

“Es nuestra obligación como miembros hacer que las cosas cambien, por ello crearemos un Rotaract con entrada libre para todos los que se quieran sumar, siempre que exista el compromiso de ayudar”, revela.

Rotaract no se va a partidizar, promete. Así, Gerardo se prepara para estar en los espacios de toma de decisiones. “Debo empezar por mi misma conciencia en lo municipal. No tiene que ser de elección popular. No vas a ver a Gerardo Sosa en ninguna boleta, por ahora. Falta madurar muchas cosas”, dice.

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