Quizá lo decidiste, acaso fue un accidente o realmente fue por necesidad. No importa el por qué: eres freelancer.
Si al principio pensaste que te habías sacado la lotería, es probable que la realidad ya te haya golpeado. Te despiertas al mediodía, andas vagando sin inspiración, te sientes estancado, mueres por pisar una oficina y ser un godín.
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Como todo tiene sus pros y sus contras. No te estreses de más ten confianza en que puedes sobrevivir, sólo necesitas establecer algunas reglas para crear disciplina ¿Cuáles? Sigue leyendo.
1. Crea una oficina
Si tienes un estudio, úsalo. En caso contrario, créalo. No importa que sea al lado de tu cama o en el comedor. Necesitas un espacio de trabajo en el que todo esté organizado y tengas las herramientas indispensables para concentrarte. La idea es que no hagas tu trabajo sentado en tu cama.
2. Planea un horario
No tiene que ser de 8 am a 5 pm, pero sí debes acostumbrar a tu cuerpo y a tu mente a que tienes horas de trabajo. La disciplina es aburrida, pero te ayudará a concentrarte más rápidamente y la sensación de rutina te ayudará a no volverte loco.
3. Usa ropa formal
Bien dice el dicho: vístete para el trabajo que quieres (no importa que estés en tu casa). Si la idea de un traje sastre te da alergia, solo asegúrate de estar en jeans y una blusa casual. El punto es que no te quedes en pants y en pijama todo el día, porque a la larga esto podría tener impacto negativo en tu autopercepción.
4. Organízate
Lo bueno de ser freelance es que no hay jefe; lo malo, que puedes perder tus objetivos de vista. Escríbelos y trabaja por ellos. Compra una agenda, lleva horarios de lo que debes cumplir a diario, no te atrases con tus actividades establecidas y evita que se te acumule el trabajo. Se profesional, no importa que nadie te esté viendo.
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5. Aprende a dejar el trabajo en la oficina
Aunque está en tu casa, no se trata de que trabajes 24/7. No te llenes de trabajo, aprende a separar tu vida personal de la profesional y a darle el tiempo y el espacio suficiente a ambas.
AG