Los chefs Lucía Freitas (A Tafona y Santiago de Compostela, en España) y Diego Oka (La Mar by Gastón Acurio, en Miami), protagonistas de las Cenas de altura de Millesime GNP Weekend, coincidieron en la convivencia que ofreció Bruce James, director del Hotel Matilda, y destacaron la riqueza del producto para la gastronomía que hay en nuestro país.
“Mi sueño era venir a México, es una cultura, una gastronomía, unos productos que tienes que vivirlos. Estoy feliz de que me hayan invitado a Millesime en México”, dijo a MILENIO la chef originaria de Galicia, al llegar a la convivencia que ofreció Bruce James.
Apasionada por la gastronomía desde hace casi dos décadas, la chef explicó que su propuesta se distingue por “interpretar la cocina tradicional de Galicia, darle una vuelta, reformular un poco todo y traerlo a la vanguardia, pero sin perder la raíz”.
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Acompañada por su equipo, Lucía se sumó a la velada en la que el chef Vicente Torres ya preparaba la cena, y el anfitrión, Bruce, daba la bienvenida a sus invitados (los chefs que fueron parte de Millesime) con un coctel de Casa Dragones.
El chef Diego Oka fue otro de los invitados y compartió a MILENIO la importancia de eventos como Millesime.
“Es un gran intercambio porque vienen chefs internacionales a conocer la propuesta mexicana, y al mismo tiempo los chefs mexicanos conocen los conceptos de otros países”.
El chef peruano destacó su gusto por compartir su propuesta, “ya que Millesime te trae el producto que quieras, de máxima calidad, y en México hay mucho, lo cual se agradece, porque la calidad del producto garantiza 70% de una preparación; no en todos los eventos tienen un presupuesto tan alto”.
Para su participación en Millesime comentó:
“Mi propuesta es la de un peruano que ha viajado por el mundo y se ha vuelto cosmopolita, así que es una oferta más progresiva y personal, pero sin perder la esencia de mi gastronomía natal”.
A unos pasos, el movimiento de meseros indicó que era hora de sentarse a la mesa; el anfitrión tomó la palabra para saludar a sus invitados:
“Gracias por estar aquí para disfrutar antes de trabajar, es un honor tener tanto talento en esta noche que se está volviendo clásica. El concepto es free style, nada formal, todo mundo en la mesa y agarra”.
En tanto, los platillos de los restaurantes Moxi y Bovin, a base de distintas proteínas –lechón, pollo, cerdo y pescado– preparados por el chef Vicente Torres se sumaron a la escena; el maridaje se hizo con vinos de Casa Madero.
En la mesa se escuchaba el murmullo de los comensales, mientras se degustaba el menú; el tema central era la fiesta gastronómica que se celebra este fin de semana en el Hotel Rosewood y los hoteles Casa 1810 y Casablanca 7.
Manuel Quintanero Jiménez, director de Millesime, agradeció la invitación de Bruce y destacó que “la versión Millesime en San Miguel de Allende cada vez toma más fuerza”.
Claves...
La fiesta gastronómicaEl chef Carlos Gaytán y el chef Rodrigo de la Calle también participaron en las Cenas de altura.
Entre colegas
Celia Florián del restaurante Las quince letras de Oaxaca, así como José Sánchez, director del hotel Casa 1810 se unieron a la convivencia.
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