El pan de muerto no puede faltar en las ofrendas o altares que cada año alistamos en honor a los fieles difuntos, que según las creencias, visitan el mundo terrenal el 1 y 2 de noviembre. Nadie puede resistirse al sabor de esta preparación, cuyo origen se remonta a la época prehispánica, pero en ocasiones no podemos evitar preguntarnos si es bueno o malo para la salud.
Este postre es parte de una de las tradiciones milenarias que configuran la identidad mexicana, pero más allá de su sabor es una representación de lo que significa la muerte para los mexicanos. La temporada del pan de muerto ya está aquí y para que puedas disfrutarlo sin culpa consultamos a Samantha Alvarado, experta en nutrición, que nos brinda unos tips sobre la forma más saludable de comer este manjar.
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Antes que nada debes tener en cuenta que dejar de comer aquello que te gusta no es una opción, la clave es encontrar un equilibrio entre lo que comemos para conseguir una alimentación balanceada que te brinde los nutrientes y energía que necesita tu cuerpo.
"No se trata de satanizar los alimentos y casarnos con la idea de que algo es muy bueno o malo. No hay un solo alimento que suba de peso, así como no hay un solo alimento que queme grasa o te haga bajar de peso. Se trata de tener una vida saludable en balance, entonces comer pan de muerto no es malo, lo que tenemos que encontrar es la manera en cómo comerlo", señala la nutrióloga.
¿Qué nos aporta el pan de muerto?
Como cualquier otro alimento, el pan de muerto se compone de macro (proteína, grasas, carbohidratos) y micro nutrientes (vitaminas, minerales. En promedio una pieza mediana individual puede aportar de 250 (el tradicional) a 500 calorías (con relleno). Llega a tener una porción de carbohidratos similar a 5-6 tortillas, 2 cucharadas de aceite y 6 gramos de proteína, también aporta calcio, hierro y vitamina E.
"El tema aquí es la proporción porque la cantidad de carbohidratos puede ser un poco alta y entonces por eso tenemos que ver la manera en cómo lo vamos a consumir", apunta Alvarado, nutrióloga con Maestría en Nutrición Clínica y Salud Pública por University College of London.
Tips
Entonces, ¿cuál es la recomendación? A continuación te compartimos los cuatro tips para comer pan de muerto de una manera más saludable que comparte la fundadora del proyecto de nutrición Verde Agua.
1. Original vs. ajonjolí
Una pieza individual de pan de muerto de ajonjolí es una de las opciones ideales. Pese a contener proteína, carbohidratos y proteína, no tiene una porción enorme de azúcar. Ahora bien, si eres amante del tradicional -aquel de naranja y esencia de azahar- lo que debes cuidar es la proporción. Por lo que la especialista recomienda compartir uno tamaño individual.
2. Evita bombas de azúcar
De preferencia aléjate de los rellenos (nata, helado, mermeladas), dando paso a una bomba de azúcar en el cuerpo que eleva la glucosa en la sangre de manera muy precipitada, por lo que se genera una reacción metabólica para bajar el azúcar, es decir una producción muy fuerte de insulina, el problema es que en esta respuesta empezamos a tener subidas y bajones de glucosa.
"Tenemos que evitar bombas de azúcar. No estoy diciendo que no comamos pan de muerto sino que más bien tengamos cuidado con los rellenos", señala la nutrióloga.
3. ¿Con qué acompañarlo?
Ten en cuenta la bebida con la que vas a acompañar tu pan de muerto, pues una taza de chocolate implica agregar de 200 a 300 calorías más, además de ser una bomba de azúcar. Por ello, lo ideal es disfrutarlo con café o té, sin azúcar. O bien, la especialista recomienda preparar tu propio cacao caliente con leche vegetal, de preferencia de soya.
4. Disfrútalo
El pan de muerto forma parte de nuestras raíces mexicanas y una tradición que representa el ciclo de la vida, así que deja de enfocarte sólo en las calorías y deleita al paladar con una pieza, pues como te compartimos existen maneras de comer este postre de manera más saludable.
Pan de muerto Snck bar, una versión saludable
Ante la demanda de alimentos más ricos en nutrientes, el mercado de la repostería ofrece varias versiones saludables del pan de muerto que son igual de deliciosas que un original, desde la versión keto hasta piezas de menor tamaño, entre éstas tenemos el de Snck bar.
Esta versión saludable de pan de muerto es bajo en carbohidratos, pero sin llegar a ser keto, pues está hecho de harina de coco y trigo y aceite de canola, además es endulzado con monk fruit, aunque mantiene el típico espolvoreado de azúcar; una porción equivale a una tortilla y media de maíz.
Lo mejor es que no sólo tienen la versión original, también ofrecen otros dos estilos: uno elaborado a base de guayaba liofilizada, es decir que pasa por un proceso que consisten en congelar la fruta para potencializar el sabor; la segunda está hecho con crema de nuez de la india y cacao. Cuentan con servicio de entrega a domicilio, por lo que puedes realizar tu pedido a través de sus redes sociales o WhatsApp.
amt