La ubicación de la suite presidencial en el piso 26 del hotel JW Marriot en Polanco permite que la vista se deleite con la imagen de la Ciudad de México, al llegar a la cita donde todo está preparado para la experiencia con los vinos de Remírez de Ganuza.
José Ramiro Urtason, el dueño de la vinícola, da la bienvenida a los invitados a la cata que se ha preparado con las diversas etiquetas del vino español, que en México ha encontrado un gran aliado.
De entrada, explica que “se trata de una bodega pequeña, situada en Samaniego, una comunidad de 300 habitantes, al norte de Rioja, a una hora al sur de Bilbao y 3 horas y media al norte de Madrid”.
Y una vez que ha ubicado a sus invitados en donde se localiza su vinícola, continúa explicando un poco de historia, mientras en cada uno de los 12 lugares que se han dispuesto en la mesa, una tabla de quesos con jalea de higo y frutos secos; invita a los comensales a iniciar el maridaje con la etiqueta Fincas de Ganuza.
“Fue en 1989 cuando Fernando Remírez de Ganuza, quien no tenía gran experiencia en la producción, pero si comprando y vendiendo viñedos en la zona, durante más de 20 años, empezó con la vinícola”, explica el anfitrión para compartir el origen de su vinícola.
La historia de la vinícola inició con la etiqueta amarilla, reserva que con el paso de los años se ha diversificado, añade José Ramiro, cuyas etiquetas han logrado una gran posición en México de quién gusta del vino de calidad.
EL EFECTO DE LA PANDEMIA
La noche crece y con ella la empatía del anfitrión con sus invitados, por lo que ahora dirige la charla por el efecto que dejo la pandemia al consumo del vino.
“En pandemia la gente se animó a disfrutar vinos de mayor calidad y precio más elevado”, comenta.
En México hay registro de que la gente se animó a consumir vino y ahora toma una botella al año por persona, cantidad que es muy baja, pero considerable de acuerdo a los hábitos en nuestro país. Además, da preferencia a las etiquetas nacionales, seguidas de las españolas, italianas y francesas, se escucha en la velada.
Mientras que en España se está dando un fenómeno muy especial que, en cierta forma, está desplazando el consumo del vino, dice el empresario.
“Ahora en España pasa algo curioso, la gente se está animando a consumir más cerveza y gin, aunque también es cierto que los que se mantienen en el vino, consumen etiquetas de mayor calidad”, precisa, cuando él y los comensales ya disfrutan del segundo tiempo.
Ensalada Mediterránea a base de atún fresco, cous, cous, vegetales y germen de rábano, que se propone maridar con Viña Coqueta.
Al referirse al maridaje, José Ramón destaca que el punto clave “es hacer una buena elección del tipo de vino para que empaten con los alimentos y se logre una gran experiencia”.
El tercer tiempo (New York con salsa de moras y puré de papa con lenteja) ya está en la mesa; cuando el mesero sirve Remírez de Ganuza Reserva y el chef de JW Marriot, Octavio Carrillo, se suma a la escena para explicar su propuesta; misma que además de ser para la ocasión especial, también se puede degustar en los restaurantes del hotel.
“La idea del menú que realizamos fue ofrecer una propuesta que empatará a la perfección con los vinos de Remírez de Ganuza; con la idea de lograr un equilibrio entre los vinos, los quesos, las carnes y el chocolate al 73% sin azúcar”, que adelanta da vida al Paris de noche, el bello y delicioso postre que ha preparado para el cierre y que se propone maridar con la etiqueta Trasnocho.
El postre que anuncia el descenlace de la cata, se suma a la maravillosa vista de la Ciudad de México que permite la recién remodelada suite presidencial del JW Marriot.
Aunque antes de degustar el glamoroso platillo, ese cuarto tiempo (Esfera de chocolate con frutos del bosque y crema fría de café), que se propone disfrutar con la etiqueta Trasnocho; el anfitrión es contundente en su comentario.
“El maridaje clásico se hace con vinos tintos, que tienen cuerpo y estructura, pero eso no quiere decir que nos tengamos que limitar a eso; por ejemplo, los vinos que hemos disfrutado esta noche son muy versátiles porque tienen un nivel de acidez muy bueno, por lo que se llevan bien con pescados grasos, al igual que con quesos, con aves, pollo, pato con los que también logran un gran maridaje”.
Claves
Una nueva vista desde el JW Marriot
- Actualmente el hotel JW Marriot se mantiene en remodelación de áreas comunes, por lo que se ha programado que a fin de año se realice la reapertura de sus instalaciones con un toque más modernista, en el que se mantiene su esencia de lujo y confort.
- En la nueva era, el hotel contará con 4 restaurantes en los que habrá una diversidad de propuestas gastronómicas, entre ellas, una de origen japonés, así como otras opciones en las que se ofrecerán diversas etiquetas de vinos, entre las que destacan los Remírez de Ganuza.