El caso de Apple sobre la ralentización de sus dispositivos iPhone no se quedó sólo en demandas por parte de grupos civiles, sino que ahora el gobierno de Estados Unidos investigará a la marca que engañó a cientos de miles de usuarios.
En un comunicado, la empresa californiana aseguró que ha recibido "varios cuestionamientos de algunas agencias gubernamentales y estamos respondiendo".
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En diciembre de 2017, Apple admitió hacer lentos los iPhone de modelos anteriores para garantizar el rendimiento de la batería del dispositivo; sin embargo, muchos usuarios consideraron que se trataba de una maniobra para hacer que cambiaran de modelo continuamente.
La empresa aseguró que esta decisión no la hizo con malas intenciones, pues nunca haría "algo para acortar intencionalmente la vida de un producto de Apple" y que su objetivo siempre ha sido "crear productos que sean amados por los clientes. Haciendo que los iPhone duren lo más posible".
La nueva actualización de iOS que estará disponible en marzo le dará la posibilidad a los usuarios de elegir si su teléfono se haga lento para salvaguardar el rendimiento del dispositivo y de la batería o no.
mrf