¿Crees que para ser atractiva una mujer debe ser delgada? ¿Crees que las mujeres que no son esbeltas seguramente tienen algún problema de salud? ¿Te escandaliza cuando una mujer gorda utiliza ropa que deja a la vista su piel? Si contestaste que sí a más de una de estas preguntas, debemos informarte que quizá padezcas gordafobia.
¿Qué es la gordafobia?
No, no nos estamos refiriendo al temor de convertirte en una persona obesa, ni tampoco significa que le tengas miedo a las personas que lo son. Para la RAE, fobia no significa sólo el temor incontrolable a algo, sino la aversión exagerada a alguien o algo, sentimiento generalmente ocasionado por la intolerancia a ideas o situaciones que no concuerdan con nuestra manera de pensar. Es así que la gordafobia es la aversión y la discriminación a las mujeres gordas por el hecho de no cumplir con los estándares de belleza impuestos por los medios de comunicación y la sociedad.
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Para Yadira del Mar, activista y socióloga por la UAM Azcapotzalco, hablar de gordafobia es más importante que hablar sobre la gordofobia, pues también este tipo de aversión está atrevesada por el género: mientras que un cuerpo masculino obeso tiende a ser romantizado, los cuerpos de mujeres obesas son motivo de burlas o críticas. Probablemente recuerdes el caso de la actriz Scarlett Johanson, quien fue atacada en redes sociales porque, según un medio de comunicación, "tenía tremenda panza".
Si eso pasa con una mujer caucásica, que podría representar perfectamente el estereotipo de "mujer perfecta", ¿qué podríamos esperar en nuestro propio contexto, en donde la anatomía de la mexicana es tan distinta a los estándares de la mujer blanca y europea?
¿Cuál es la causa de la gordafobia?
Según Yadira del Mar, esta forma de discriminación es un producto del contexto patriarcal y machista en el que nos desenvolvemos, en el que los cuerpos femeninos son vistos exclusivamente como un producto de consumo de los hombres homogeneizado por los medios de comunicación y las exigencias masculinas y que provocan el rechazo de cuerpos que se salen de ese estereotipo, lo que usualmente pasa con las mujeres mexicanas.
"Los medios de comunicación, revistas, Internet están plagados de estos cuerpos de belleza que sólo reproducen estereotipos: mujeres altas, blancas y delgadas, pero en el propio contexto mexicano la mayoría de mujeres no somos así. Muchas somos de estatura media, tono moreno de piel y tenemos una corporalidad más ancha, y es algo que puede llegar a afectarnos mucho porque los estándares que se nos imponen son inalcanzables para nuestra raza y anatomía.
Y explicó:
"Todo es parte de la violencia estructural que implica el ser mujer. Todos están esperando a que los complazcas, a que hagas hasta lo imposible por alcanzar estos estereotipos de belleza simplemente para ser consumida por la mirada masculina".
Prohibido decir "gorda"
El hecho de que una mujer sea gorda parece tan inaceptable que, aunque los medios y el mundo hablen de "inclusión", la utilización de ese término parece haberse convertido en un tabú, pues se evita utilizarlo en la máxima medida.
Nunca escucharás que una marca de ropa anuncie que en su próximo desfile participarán mujeres gordas, sino que el termino será adaptado a mujeres curvy, plus size o "de tallas grandes". Y, según la activista, esto no tiene que ver simplemente con la utilización de la palabra, sino, precisamente, con la misma falta de inclusión, porque, aunque se muestren a mujeres más grandes, casi nunca aparecen modelos con estrías, panza, o busto muy grande, y siguen siendo, finalmente, cuerpos de consumo.
"Nunca vemos a una mujer que dio a luz a 3 hijos y que ahora tiene estrías, o a una mujer con una panza o espalda grande, nunca vemos a las indígenas o a las mujeres negras y todo sigue un patrón que obliga a repetir estereotipos. Tanto es así que, por ejemplo, para un hombre no es lo mismo decir 'ando con una muchacha gorda' a decir ' ando con una mujer que modela lencería curvy'".
Sobre la gordura y la salud
Según explicó Yadira del Mar, el tener una corporalidad grande no significa tener un pésimo estilo de vida o estar enferma. La especialista afirma que dentro del activismo gordo se está consciente de que los problemas de salud que un estilo de vida sedentario acarrea son variados; sin embargo, no significa que toda mujer gorda tenga una salud precaria: por el contrario, Del Mar conoce a muchísimas mujeres gordas que que tienen una excelente condición física y se cuidan como cualquier otra persona.
No obstante, admitió que es necesario ir al doctor para comprobar que, efectivamente, el estado de salud sea el óptimo. Para finalizar, Yadira del Mar invitó a las mujeres a intentar amarse a sí mismas tal y como son, y las instó también a no reproducir conductas violentas y machistas con otras mujeres, ponerse en los zapatos ajenos y aprender a aceptar la diversidad, recomendación que deberían seguir también los hombres.
"Aunque no hay una fórmula para aceptarnos y sentirnos seguras, debemos tomarnos el tiempo para reconciliarnos con nuestros cuerpos, pues es lo único con lo que contamos para enfrentarnos a la vida. Así que si eres gorda, pero te gusta esa falda o esa playera sin mangas, póntela y olvídate de los prejuicios", concluyó.
cjr