La Autonomía Curricular es una iniciativa de la Secretaría de Educación Pública (SEP), cuyo propósito es contribuir al desarrollo integral de los estudiantes, pues además del programa oficial, proponen asignaturas y actividades adicionales como finanzas personales, huertos verticales, liderazgo, entre otras.
Pero, ¿para qué sirve que tus hijos tomen clases que no tienen nada que ver con sus con sus asignaturas académicas? Por una parte, les da la oportunidad de aprender temas de su interés y el de la escuela, así como de desarrollar nuevas habilidades, superar dificultades, fortalecer sus conocimientos, su identidad y su sentido de pertenencia, y todo ello para ser mejores emocionalmente hablando.
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La otra parte es que los beneficios no son solo para los alumnos, sino que también ofrece a los profesores espacios para renovar su práctica docente, además de adaptar contenidos educativos a las necesidades y contextos específicos de una comunidad.
“La Autonomía Curricular se rige por los principios de la educación inclusiva, porque busca atender las necesidades educativas e intereses específicos de cada alumno, al mismo tiempo que cubre las de su comunidad”, dice Javier Barrientos, director de Desarrollo Curricular para educación secundaria de la SEP.
¿Cómo funciona?
Para definir los temas que la escuela pondrá en práctica, es necesario hacer un consenso entre las autoridades escolares y los alumnos, es decir, “la escuela definirá cómo realiza la estrategia del levantamiento de información, y el método que utilizará para hacerlo.
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La Autonomía Curricular corresponde a la escuela, pero lo que las autoridades escolares vayan a plantear tiene que poner por delante los intereses de los estudiantes”, explica Barrientos.
Para elegir estas actividades, divididas en cinco campos, la SEP ofrece un listado de los temas que podrán incorporarse, así como el plan y programas de estudio correspondientes.
Hoy, la Autonomía Curricular le da a la escuela la oportunidad de plantear nuevas áreas a desarrollar en la vida de los estudiantes, “desde preescolar hasta secundaria. Todos estos temas son necesarios para la vida actual del país y para el mundo globalizado en el que vivimos. Entre mayor sea el conocimiento que tengan los estudiantes sobre diversos temas, mayores serán las posibilidades de éxito en su vida personal”, finaliza Barrientos.