Al hablar de la representación de México en el extranjero, hay ciertos elementos tradicionales que han perdurado durante décadas, configurando el imaginario colectivo en torno a la moda nacional. Sin embargo, existe un mundo de estilos que a menudo son relegados al olvido. Es aquí donde emerge el diseñador mexicano Antonio Zaragoza, que llegó a mi radar durante su debut en la Semana de la Moda de París, en la que presentó una serie de diseños en colaboración con el Club Deportivo Guadalajara, mejor conocidos como Chivas. Ver el escudo de mi equipo presentado en uno de los eventos de moda más importantes del mundo fue una experiencia surreal, por lo que inmediatamente investigué todo sobre su creador y me volví una seguidora de su trabajo. Hoy, tengo la oportunidad de charlar con él sobre su marca, Liberal Youth Ministry, en la que Antonio fusiona una diversidad de influencias de diferentes nichos, creando así una identidad única que ha podido ser observada en la famosa tienda de lujo Dover Street Market.
La travesía de Antonio Zaragoza en el diseño inició con una inusual fuente de inspiración: los videojuegos. La habilidad de vestir avatares y dotarlos de un estilo personal desencadenó su fascinación por la moda. No obstante, fue durante su niñez en Estados Unidos, buscando un mejor futuro junto a su familia, cuando Antonio experimentó una revelación. Observando a distintos grupos sociales en la escuela descubrió que la manera de vestir de sus compañeros determinaba la forma en la que eran percibidos. Los pantalones de los skaters y las chamarras de cuero de los punks tenían un efecto (consciente o inconsciente) en el trato que recibían. Esta noción lo llevó a comprender el poder de la moda y la importancia de expresar la propia identidad a través de ella.
El inicio de su marca marcó un momento de reflexión para Antonio. Durante su formación como diseñador, le enseñaron a buscar inspiración en el mundo exterior para crear colecciones, pero admite que él nunca logró conectarse con temas ajenos a su identidad y pasiones personales. En un momento de introspección, comprendió que su marca debía ser un reflejo fiel de sí mismo y de su entorno. Tomó entonces a la juventud como inspiración principal, una juventud que no tiene nada que ver con la edad sino con la libertad del espíritu, y en 2016 nació Liberal Youth Ministry.
El reconocimiento internacional de la visión de Antonio es evidente. Los diseños que desafían las convenciones de cómo debe lucir una marca mexicana han captado la atención de amantes de la moda como Justin Bieber o Bad Bunny. Sin embargo, su ambición va más allá de la notoriedad, y es que Antonio Zaragoza tiene como objetivo principal hacer de la moda un medio accesible y democrático. Inspirado por diseñadores como Raf Simons y Jun Takahashi, cuyas creaciones emanan juventud pero cuyos precios suelen contradecirlos, Antonio habla sobre su visión:
“Creo que el pilar principal de la marca desde un inicio, y lo recuerdo perfectamente, es que debía ser comercial. Quería hacer ropa que la gente pudiera comprar, que fuera fácil de usar y que fuera accesible y económica de alguna manera”.
La esencia de Liberal Youth Ministry radica en la amalgama de disciplinas e influencias que la conforman. Antonio no solo busca satisfacer a los diversos nichos de mercado que se identifican con la marca, sino también generar un atractivo comercial. Su capacidad para unir distintas subculturas en diseños significativos es un testimonio de su capacidad creativa. A principios de este año, los diseños que presentó en la Semana de la Moda de París en colaboración con Chivas se hicieron virales.
“Al montar la idea de hacer este desfile en París, tenía que traer a México de alguna forma; tenía que hacerlo de la manera correcta, porque no me encanta caer en el folclor. No es que esté mal, pero a nivel de diálogo con mi marca no es el lado mexicano que quiero transmitir. Hay otros caminos que me gustaría explorar, y creo que este tema del fútbol y las Chivas resonaba muy bien con mi discurso. Personalmente, estaba muy nervioso, porque para los mexicanos el fútbol es sagrado, y tocar esas fibras tan sensibles, siendo un equipo con más de 100 años de historia, es arriesgado. Cuando vi la respuesta en las redes sociales, casi 90 por ciento eran positivas. Creo que fue exitoso porque siempre estuvo presente la libertad creativa”, menciona el diseñador.
La evolución de Antonio Zaragoza y su marca ha sido constante. Su última colección, Fuego nuevo, refleja un nuevo comienzo y una mirada hacia el futuro. La ceremonia de origen mexica que inspiró el nombre de esta colección representa una metáfora del renacimiento que ha experimentado el diseñador. A través de cada prenda, Antonio busca atraer equilibrio a su vida, y quizás de paso a la industria de la moda misma. Al romper esquemas y apostar por una moda democrática, Antonio ha elevado el nombre de México en la escena internacional. Su enfoque en la conexión con la cultura mexicana y su deseo de inspirar a futuras generaciones de diseñadores hacen de Liberal Youth Ministry una marca que continúa su camino hacia un futuro prometedor.