Tiendas cerradas hasta nuevo aviso, talleres parados, falta de materiales, artesanos y costureras sin trabajo… así es como se ve la industria de la moda mexicana; los diseñadores saben que la pandemia de coronavirus los afectará económicamente, uno de los pocos rayos de luz que les quedan viene de las plataformas digitales y los desfiles virtuales, que sin duda representan nuevos retos para un gremio acostumbrado a la actividad presencial.
“Nos ha afectado por completo, somos uno de los sectores comerciales más afectados, no nos consideran de primera necesidad, entonces, tenemos todos los bloqueos. Tuvimos que parar por completo nuestro taller, para que nuestro equipo no se enfermara. De por sí, ser diseñadores de moda en México no es tarea fácil, cambiarle la mentalidad al mexicano de que lo nacional está bien hecho. Pero el trabajo jamás termina, seguimos bocetando”, dice el diseñador Víctor Olmos a M2.
Su marca, Olmos y Flores, se presentará este domingo a las 21:00 horas en el Mercedes-Benz Fashion Week Mexico City (MBFWMx) con un video muy especial: invitaron a amigos a hablar desde su cama, sobre moda pero también de México, porque cada una de sus prendas indaga en la identidad nacional. Este 2020 cumplen 10 años, pensaban festejar con una exposición fotográfica y desfiles –que se posponen al 2021– pero ahora lo harán con un festival virtual.
“Sólo queda mirar al futuro y ver qué podemos hacer para mejorar nuestra situación; cómo vamos a generar cosas que sean revolucionarias, para la mente incluso, porque vamos terminar dañados emocionalmente con la cuarentena. Nos agarro en curva en todos, pero el MBFWMx en YouTube es una buena plataforma, estamos emocionados por toda la industria, podremos llegar a personas que quizá no nos conocen”, indica el cofundador Alí Flores.
El Colectivo Diseño Mexicano, que apoya a los diseñadores mexicanos incentivando la compra-venta de producto local, también lo ha resentido. “Es un hecho que esto va a impactar negativamente en la industria”, sostiene Daniel Herranz, aunque destaca que el trabajo de promoción no puede parar.
“En estos días, íbamos a presentar con una gira un libro que se llama Hecho en México, que habla de los últimos 20 años de la moda mexicana, su evolución y el nacimiento de proyectos. Lo que sigue es ver de qué forma podemos hacer más ruido con el libro y empezar a ayudar a los diseñadores, como lo hacíamos cuando teníamos ventas presenciales, ahorita lo que más necesitamos es ver de que forma entre todos colaboramos para que podamos salir adelante”, señala.
El colectivo apoya a No Name, firma mexicana de street couture, y trabaja con ella para presentar un video en el MBFWMx este sábado a las 19:30 horas, para ello, mandaron paquetes a influencers y modelos, trabajando sólo a la distancia; el reto es no poder “gobernar todo” ni poder hacer cambios de último momento, como sucede en los desfiles en vivo.
“Es súper complejo. Tengo mi taller cerrado desde hace un mes, fue crear una colección con materiales disponibles, reciclando ropa; nuestros materiales se quedaron en procesos de envíos. Me tumbó el decir: híjole, la inversión del año se pausa. Un equipo de 12 personas nos quedamos con el miedo de qué vamos a hacer. Lo que nos ha enseñado la pandemia es a tener más creatividad, eso nos va ayudar”, menciona Jonathan Morales, fundador de la marca.
Esa creatividad que menciona seguirá de pie, pues aunque no salgan bien librados, todos tienen como objetivo seguir sus proyectos de responsabilidad social: No Name usando telas veganas, y Olmos y Flores trabajando con artesanos, hablándole a la comunidad LGBT+ y los cuerpos diversos, con modelos curvy y plus size.
Este viernes también se llevará a cabo el Earth Fashion Show Aéropostale, que celebrará a la Madre Tierra con una cápsula de video, un set de DJ Mariana Soto y una línea de ropa eco-friendly, demostrando que hasta las grandes marcas tienen que reinventarse. “Tuvimos que adaptar todo nuestro contenido, ser empáticos con las situaciones tan delicadas que se están viviendo, pero queremos ofrecer un rato de entrenamiento. Ha sido complicado, cada uno desde sus casas”, indicó Pamela Ávila, brand manager de Liverpool y vocera de la marca.