Originaria de Puerto Rico, la Piña colada es la bebida que remite al Caribe por excelencia, un trago y puedes sentir la brisa en la cara y escuchar las olas del mar color turquesa. Recientemente, esta bebida tropical cumplió oficialmente 65 años de existir, sin embargo, la gente aún no se pone completamente de acuerdo respecto a su creación.
En el hotel Caribe Hilton
La historia oficial dice que fue el barman Ramón "Monchito" Romero quien firmó en 1954 un certificado que lo acredita como el inventor de la Piña Colada, después de que su jefe en el hotel Caribe Hilton en San Juan, Puerto Rico, le solicitara crear una bebida que nunca nadie hubiera probado antes para atraer a los clientes.
Ramón quería que además, la bebida llevara el sello tropical de la isla, por lo que la piña y el coco fueron sus aliados favoritos. Sin embargo, la coincidencia también jugó a su favor, pues la crema de coco "Coco López" había sido recientemente inventada y puesta a la venta en los super mercados.
Así, sustituyendo el coco natural por esta crema y añadiendo un poco de leche evaporada, y por supuesto el ron, Ramón dio con la bebida que se volvería famosa mundialmente y que se convirtió en la bebida nacional de Puerto Rico en 1978.
Una historia de piratas
Por su puesto alguien intentó quedarse con el crédito de "Monchito" pues uno de sus compañeros del Caribe Hilton, Carlos Gracia, contaba que en realidad había sido a él a quien se le había ocurrido la mezcla. Sin embargo ninguno de sus compañeros hizo nunca segunda a sus declaraciones.
Sin embargo, la historia más extravagante y divertida se remonta hasta un temprano siglo XIX cuando los piratas aún aterrorizaban el Caribe. La leyenda dice que fue el famoso pirata puertorriqueño Roberto Cofresí quien mezcló los ingredientes de la piña colada por primera vez.
Dicen que en su barco El Mosquito, Cofresí solía tomar el ron que transportaban y mezclarlo con jugo natural de piña y coco, para después ofrecerlo a su tripulación para levantarles la moral en épocas de necesidad.
Sin embargo, haber sido pionero en la invención de dicha bebida no lo salvó del fusilamiento, cuando lo capturaron después de intentar atacar por error un barco del ejército estadunidense.
Por supuesto esta historia es sólo una leyenda, pero quizá, si llegó a los oidos de Monchito, pudo haber sido la inspiración perfecta para su creación, la piña colada como la conocemos ahora.
cjr