Mucha gente utiliza la palabra “resistol” para referirse al pegamento líquido color blanco, ese que viene hoy en tu lista de útiles escolares que sin duda, también puedes reciclar en este regreso a clases 2021, las personas sin saber ya lo utilizan como sinónimo de pegamento líquido y en ocasiones también al lápiz adhesivo.
Sin embargo, pocos saben el origen de esta palabra. Para empezar, y pese a que se ha vuelto una palabra común, la palabra ‘resistol’ corresponde a una marca registrada, perteneciente a una empresa con más de un siglo de antigüedad, originaria de Mérida, Yucatán en México.
El origen del nombre de Resistol son las palabras en inglés “resist all", que significa “resiste todo” y desde hace más de 75 años se sigue usando como un vocablo muy común en países latinoamericanos
RESISTOL
Para producir el Resistol se utiliza la tapioca, ya que a partir de ésta se genera la dextrina, base de un adhesivo. El origen del nombre de Resistol son las palabras en inglés “resist all", que significa “resiste todo”.
Historia de Resistol
Resistol nació en Mérida, Yuc., a principios del siglo XX, cuando el fundador de la empresa, Dr. Rodolfo Patrón, decidió comprar unas fincas y cultivar la yuca, de la cual obtuvo almidón; además, utilizó la fécula de tapioca de su hacienda para producir dextrinas, y así, a partir de este elemento natural, desarrolló el PVA, que es la base de los adhesivos polivinilos.
Algunos años después, el Dr. Patrón envió a su hijo a estudiar a Estados Unidos, en donde descubrió otros usos que se le podían dar al almidón, como el desarrollo de pegamentos, así que le propuso a su padre extender el negocio. Así crearon la tecnología para el cambio: su primer paso fue la producción de pegamentos industriales para pegar etiquetas de cerveza, que tenían resistencia al agua.
Algunas generaciones aún recuerdan aquella imagen de un elefante parado sobre un charco blanco de pegamento, el cual, con cierta desesperación, intentaba despegar una de sus patitas; no obstante, el tiempo avanza y para muchas personas, dicha ilustración -que por varios años hizo alusión a la marca de adhesivo Resistol- ya no tiene absolutamente ningún significado. El elefante que comenzó la historia se extinguió; sin embargo, este producto que en algún momento acompañó a chicos y grandes al momento de hacer una que otra manualidad.