El Santuario: Clase y estilo lo colocan nuevamente entre los mejores de México

El recinto clásico con colecciones de alfarería y diversos materiales en sus habitaciones compite por segundo año consecutivo en el listado de Condé Nast Traveller

El hotel recrea la naturaleza y el arte | Y. Villalpando
Y. Villalpando
San Miguel de Allende /

Competir por ser el mejor hotel de México no es nada sencillo, pero hacerlo por segundo año consecutivo es toda una hazaña que es reconocida por directivos, empleados, pero sobre todo huéspedes del Hotel El Santuario, ubicado en el corazón de San Miguel de Allende, donde la tradición, la alfarería, pintura, historia, naturaleza, cultura y recreación van de la mano.

El hotel entró en el ranking 2022 del listado de Condé Nast Traveller, siendo la sorpresa más agradable para Grupo México Real, que ha invertido tiempo y esfuerzo en llevar a este recinto más allá de la simple hotelería y convertirlo en un espacio de historia y tradición, no solo de Guanajuato, sino de los estados vecinos.

“Tratamos de crear un espacio que resulte cómodo pero a la vez interesante para le gente que nos visita y se hospeda. Tenemos la suerte de estar sobre una colina y eso nos permite que nuestros tres edificios se conviertan en un espacio que combina la tranquilidad, pero también el clima que va cambiando, conforme vas bajando hacia las habitaciones”, afirma Gabriel Quijano, nuevo gerente general de El Santuario.

Y es cierto, ya que la orografía de San Miguel permite estos descensos naturales, el hotel ha aprovechado la construcción en tres edificios principales que, además de historia, permiten que los climas vayan cambiando, conforme se adentra uno en este recinto.

Las toritllas ceremoniales son una tradición | Y. Villalpando

“La entrada está a dos o tres metros más arriba de donde nos encontramos en este momento, y si seguimos bajando notarán que por estos corredores el viento sopla diferente y el clima va cambiando notablemente”, afirmó el ingeniero Arturo Morales, un verdadero experto en historia local, y quien se encargó del tour por las instalaciones.

Corredores no lineales, donde destacan diversas piezas de cerámica, alfarería y platería, 29 habitaciones con muebles y materiales que van desde la madera hasta el vidrio y la platería, “todas diferentes”, aclara Marigel Piquent, su dinámica directora comercial, pero sobre todo un ambiente de quietud en medio de la naturaleza, con una jacaranda de más de 100 años y una gastronomía empírica y regional que han perfeccionado las manos de cocineras locales.

“Hemos reunido a mujeres de municipios cercanos y de aquí mismo de San Miguel, que le han puesto su propio estilo a la gastronomía clásica que ya presentábamos, siempre estamos innovando, eso le ha dado un toque muy personal a nuestros platillos”, afirma el chef Carlos Serrano, encargado de la cocina del hotel.

Gastronomía. Masterclass de Nixtamalización

Durante la visita se llevó a cabo la una masterclass de nixtamalización, donde la creación de la tortilla ceremonial fue el punto principal. Una cocinera local se dio a la tarea de contar la historia de este producto, que se hace “con mucho cariño (la tortilla) y con una mezcla de muicle, una planta que se da mucho por estos lugares y que se ha usado durante decenas de años por las cocineras locales”, dijo.

Luego de tostar algunas plantas en el comal, llega el momento de colocarla en los líquidos para que se forma una mezcla homogénea y pastosa que se coloca en una madera tallada con la forma que se desee, con mucho cuidado se coloca la tortilla y tras unos segundos, esta se pinta y se lleva al comal, para que quede la figura a lo largo de la tortilla.

“Ha pasado por generaciones este conocimiento y no hay mejores exponentes que las cocineras locales”, indicó el chef Serrano.

Además, a la llegada se encuentra La Samaritana, una barra de aguas frescas, donde los sabores a cítricos, horchata, tepache y frutos rojos, reciben al sediento viajero, que busca refrescarse tras el largo camino para llegar a su hospedaje.

“La historia cuenta que cuando los viajeros llegaban a su destino, había una persona que los recibía con agua fresca, y con el calor que se siente en esta parte e México, esto era una bendición, de ahí el nombre de samaritanos, que se incluyó en esta recepción”, recordó el ingeniero Morales.

Hotel El Santuario compite este año por mantenerse en el top 10 de los mejores hoteles de México y para ayudar a que lo consigan usted puede entrar a https://www.cntraveler.com/story/vote-readers-choice-awards

La Samaritana sacia la sed del viajero | Y. Villalpando

Claves

  • Se encuentra en calle Allende, una de las más fotografiadas de San Miguel de Allende.
  • Se realizó un maridaje en el que las etiquetas del Viñedos San Miguel ofrecieron una gran experiencia.
  • Cuenta con un pequeño bar llamado La Sanmiguelada, que fue decorado por el artista sinaloense José Luis Arias.

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