Con casi 20 años en el mundo turístico creando conceptos que buscan complacer y conquistar a los huéspedes; Alfredo Renteria, quien actualmente se desempeña como General Manager de Hacienda Xcanatun; es contundente al hablar de las tendencias que imperan en ámbito en que se desarrolla
“La labor más importante en un hotel es poder tocar las emociones de los huéspedes, porque cuando tú logras que la experiencia que ofreces, en la que se integra servicio, actividades y amenidades, toquen las emociones del huésped y con ello se produzca la recomendación o bien el retorno del visitante, quiere decir que estás haciendo bien tu trabajo”. dice el ejecutivo al iniciar la entrevista con MILENIO.
Para ello destaca que, en su experiencia, y concretamente en la labor que actualmente desempeña en Hacienda Xcanatun tiene un procedimiento especial.
“Es importante destacar que en la satisfacción del huésped se materializa todo un sistema de trabajo de equipo; pues no soy yo o un ejecutivo quien crea las experiencias para complacer a nuestros huéspedes. Tengo un equipo que trabaja todos los días, pero una vez al mes nos reunimos una camarista, un mesero, un cocinero, una persona de mantenimiento porque son ellos quienes realmente conocen y saben cuál es el comportamiento de los huéspedes, sus gustos, sus necesidades, de qué lado duerme, qué tipo de fruta le gusta o cuál bebida es de su preferencia. En esa junta todos opinan y nos retroalimentamos para seguir ofreciendo la mejor experiencia al turista”, precisa el ejecutivo, quien está al frente de las experiencias de lujo y confort que distinguen a Hacienda Xcanatun.
La nueva sede de Rentería a tan solo 20 minutos de la capital yucateca se distingue por su vasta historia que data del siglo XIX, cuando era una hacienda ganadera, que con los años se convirtió en una importante sede henequenera y de unos años a la fecha se ha transformado en un remanso que se fortifica con la cultura propia del lugar y se ha enriquecido con el lujo y confort con el que han ambientado cada uno de sus espacios y sus 56 habitaciones, acorde al estilo de la cadena Banyan Tree a la que desde hace 4 años pertenece el hotel.
“Estamos en el proceso, donde la estrategia es elevar el nivel de servicio, elevar el nivel de ocupación, elevar el nivel de las experiencias para huéspedes y con programas de lealtad para gente local”, comenta el ejecutivo, quien apenas hace unos meses se unió al equipo Xcanantun.
Sin embargo, su experiencia le permite decir que otra de las tendencias que marca la diferencia hoy en día de un hotel a otro es ofrecer un servicio genuino.
“A la gente ya no le gusta el aspecto ceremonioso, el huésped gusta de un servicio genuino, auténtico y no robotizado. En Xcanatun tenemos meseros y camaristas con una cultura grande y un corazón enorme, con muchas cualidades que valen oro y son completamente genuinos y eso lo agradece la gente.
“Hay hoteles de gran lujo, de marcas muy grandes, que son demasiados ceremoniosos, pero la gente ya no está acostumbrada a eso, después de la pandemia cambiaron las cosas, la gente que paga el tipo de tarifas como Xcanatun está buscando otro tipo de experiencias, le gusta que lo reconozcan, incluso que le llamen por su nombre y no como el huésped de la habitación 35; y es ahí cuando se da la conexión, el factor que hace que ese visitante regrese”.
Como parte del concepto que distingue a Xcanatun, también están preparando las residencias, una variante que ofrece un plus al propietario de las mismas.
“Tenemos 88 residencias que están rodeando los jardines del hotel, muy similar al complejo que está en San Miguel de Allende, que son parte del hotel, parte del pull de renta; es decir, tú compras una residencia y la pones a disposición del hotel y éste se encarga de rentarla de tal forma que es una inversión que tiene un gran rendimiento, e incluso retorno de inversión. En este momento se están construyendo y el plan es tenerlas preparadas para finales de 2025”, concluyó el ejecutivo.
AJR