El paso a amarillo en el semáforo epidemiológico ha permitido poco a poco volver a salir, ir al cine, hacer pequeños paseos e incluso escapadas a lugares cercanos e incluso ahora podemos volver al teatro, restaurantes y hasta conciertos.
Pero tal vez, si no has salido en este año de contingencia sanitaria, prefieras algo paulatino y sin tanta gente, así que te tenemos tres propuestas que seguro te harán pasar un fin de semana perfecto.
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Orgánico Hotel Boutique
A sólo 20 minutos de la Ciudad de México, en la localidad del Ajusco se encuentra este maravilloso lugar, para pasar unos días alejados del ruido y el ajetreo de la ciudad.
La vista del complejo es inmejorable, el verde de la montaña inunda todos tus sentidos y se respira paz en todo momento.
Son 21 cabañas de lujo equipadas con chimenea, baño con amenidades y una terraza maravillosa para disfrutar de su servicio de fogatada y recordar esos viajes al bosque en donde quemabas bombones y tomabas chocolate caliente mientras sonreías y eras feliz.
Este hotel boutique tiene un restaurante que ofrece deliciosos desayunos (para disfrutar de este servicio no es necesario que estés hospedado) y los domingos un brunch con la típica comida que todos amamos; chilaquiles, huevos al gusto, tlacoyos y hasta los infaltables tamales.
También el lugar tiene un bar para tomar un drink y brindar frente a los cientos de árboles que rodean el lugar.
Si tú plan es romántico puedes contratar el servicio de picnic que incluye una canasta de frutas, vino y una selección de carnes frías.
En este paraíso, se puede descansar por completo pero si quieres un poco más de acción, está la casa club, que tiene una mesa de billar, juegos de mesa y muchísimos libros para que te pierdas en alguna de sus historias.
Definitivamente no hay forma de que te aburras, en sus jardines, puedes practicar tiro con arco, andar en bicicleta o recostarte en un camastro y ver el cielo azul.
También puedes contratar una caminata y practicar hiking hacía el Pico del Águila o al Volcán del Xitle.
¿Dónde se encuentra?
Camino Real 30 de Marzo, San Miguel Ajusco, Tlalpan
Viñedo San Francisco
Entre viñedos, olivos y campos de lavanda se encuentra este hotel boutique que no te puedes perder.
El complejo forma parte del grupo de la Santísima Trinidad un concepto inmobiliario con spa, club hípico, casas de campo, club hípico y área agrícola con cultivos de vid y olivo.
Este fascinante lugar está a 20 min del centro de San Miguel de Allende y está conformado por 14 habitaciones con todas las comodidades que te harán querer regresar una y otra vez.
La habitación tipo cabaña, está conformada por dos pisos, tiene vista a los viñedos y a un espejo de agua, en donde podrás despertar hasta con una garza en tu balcón.
Cuenta con una tina tipo jacuzzi en su terraza para relajarte y tomar una copa de vino de la misma vitivinícola.
No puedes dejar de dar un paseo en bicicleta por la mañana para disfrutar cada rincón del lugar
También es posible contratar un tour a los viñedos para conocer todo el proceso de la elaboración del vino y de paso disfrutar una cata con maridaje incluido.
La cocina de su restaurante es de primer nivel, el chef Raymundo Armas quien prepara platillos de talla internacional dignos de probar.
¿Dónde se encuentra?
Carretera Querétaro-San Miguel de Allende, Km 26, San Miguel de ALlende, Guanajuato.
Amomoxtli
Un pavimento empedrado da la bienvenida a la antesala de la casa principal, que recibe al viajero con una jungla de árboles centenarios.
El hotel es pura naturaleza, serenidad, fragancias estacionales, montañas encendidas de amaneceres y crepúsculos. Los jardines están repletos de plantas endémicas de la región, como ahuehuetes o amates, una importante selección de cactáceas, buganvilias y hierbas que posteriormente usan en su cocina y tratamientos del spa.
Las impresionantes vistas al Tepozteco nunca dejarán de sorprenderte, la protagonista del hotel es su alberca de agua templada con dos tinas de hidromasaje, pool bar y servicio de alimentos durante el día.
Cada habitación es un canto al paisaje local. Una de ellas, Cedro, tras los hermosos arcos, tiene un bello jardín privado que conduce a tu habitación, en la que podrás refugiarte. O Pino, que evoca este arbusto que sortea la finca en su camino a los ríos que rodean el hotel,y tiene vistas a los naranjos. Onix se abre a la sierra tepozteca con un balcón, con la única distracción de mirar la ventana. Todas las habitaciones están diseñadas pensando en el descanso: edredones de pluma, sábanas de algodón puro de 350 hilos y objetos recolectados en los mercados locales.
Su restaurante, Mesa de Origen, honra la cultura y la cocina regional, recuperando recetas casetas del pueblo. Todos los platillos se basan en ingredientes de Morelos y en los productos del mercado de Tepoztlán. Para los huéspedes, cócteles locales, pizzas al horno de leña y platillos regionales son servidos en el área de la piscina.
¿Dónde se encuentra?
Calle Netzahualcóyotl 115, Valle de Atongo, 62520 Tepoztlán, Mor.
nerc