¿Recuerdan el delicado vestido azul cielo de Lupita Nyong'o en los premios Oscar de 2014? O ¿el gran momento dorado de Glenn Close en un Carolina Herrera brillante con una gran capa?
Entre el mar de alfombras rojas, lo que sucede con esta ropa después de ser usada en las galas puede ser muy peculiar, depende de quién seas y cómo te llevas con el diseñador. La decisión de un diseñador de regalar o no regalar las prendas suele venir después de la gran noche cuando los estilistas tienen que empacarlas y devolverlas.
- Te recomendamos Jean Paul Gaultier dice adiós cobijado por sus musas en un desfile de más de 200 diseños Moda y Belleza
“Si están encantados el diseñador dice ‘por favor quédenselas, la hice para ella, ella debería tenerla’”, dijo la estilista Emily Sánchez, quien ha vestido a Laura Linney y Sutton Foster, entre otros. “Si un diseñador siente que quiere algo inmediatamente son bastante claros al respecto”.
Muchos vestidos viven en los archivos del diseñador, para ser prestados para museos u otros eventos especiales, como el esmoquin de Christian Siriano que usó Billy Porter en los premios Oscar del año pasado y se volvió a poner recientemente para Sesame Street. Es aún más raro que una celebridad los compre.
“Para Oprah, tenemos trajes hechos a la medida y pagamos por ellos, así que se los queda”, dijo Adam Glassman, director creativo de la revista O, The Oprah magazine.
En estos días, dijo Sánchez, a la mayoría de los nominados se les ofrece ropa hecha a la medida.
“Ese es como el gran honor. Generalmente trabajas con el diseñador directamente. Es una gran oportunidad para de prensa así que los diseñadores se emocionan mucho por hacerlo”, dijo. “Si ganas probablemente quieres el vestido, pero creo que todos los que van a esos eventos están preparados para devolverlo al final del día”.
Como llegan al final de la temporada de premios, los premios Oscar son una difícil búsqueda de estilos nuevos tras un ciclo extenuante de alfombras rojas, fiestas y otras presentaciones. Aunque, también hay menos nominados que vestir junto con los presentadores.
La estilista Micaela Erlanger, quien ha trabajado con artistas como Nyong'o y Meryl Streep, dijo que en los premios Oscar son una mezcla de ropa hecha a la medida, alta costura y estilos nunca antes usados con modificaciones de silueta y color. Generalmente Erlanger busca piezas a la medida.
“Es el final de la temporada, de alguna manera tienes que recurrir a piezas únicas. Tantas cosas se han visto en el circuito. Para el Oscar probablemente ya hemos visto todos los vestidos”, dijo.
Para la gala del Oscar de este año, Erlanger vestirá a Sigourney Weaver para la gala y a Diane Kruger para la fiesta de Vanity Fair.
La estilista Chloe Hartstein vestirá al presentador Chris Rock para el Oscar. Ella trabajó con dos nominadas, Close y Melissa McCarthy, el año pasado.
Quedarse con la ropa no es algo automático para los nominados, incluyendo aquellos que ganan, dijo Hartstein.
“Es un momento Cenicienta en el que lo usas y después al día siguiente hoy estoy ahí brillando y lista para tomarlo, empacarlo y enviarlo a París o a donde sea que necesita estar. Pero hay momentos en los que tienes la suerte de quedártelo”, dijo.
Con miles de dólares de obra y materiales en juego, junto con horas de trabajo, algunos diseñadores son más generosos que otros.
Jennifer Lopez se quedó con su vestido Versace de gasa de seda con estampado de jungla original con el que atrapó todas las miradas de los Grammy en el 2000. Antes de que Lopez convirtiera al escotado vestido en uno de los más famosos de todos los tiempos, era una pieza de pasarela que había sido incluido en una campaña publicitaria de Versace y que había sido usado por Geri Halliwell y Donatella Versace, la segunda en la gala del Met de 1999.
Versace hizo duplicados para exhibirlos en museos, incluyendo el Museo del Grammy y Lopez lució una nueva versión para el desfile de Versace en septiembre pasado en la Semana de la Moda de Milán.
Close disfrutó varias piezas hechas a la medida el año pasado con sus nominaciones por The Wife. Le regalaron una capa de terciopelo negro de Armani Prive que usó en los Globos de Oro después de que ganó en la categoría de Mejor actriz de drama. También le regalaron el taje de saco y pantalón blanco de Ralph Lauren que usó cuando ganó un premio SAG por la misma película.
Este año en los Golden Globes, Close fue presentadora y usó un vestido azul rey de Armani Prive hecho a la medida. Ese también se lo regalaron. El caftán de Oscar de la Renta que llevó a los premios SAG no era hecho a la medida y tuvo que ser devuelto después de que fue presentadora en la gala.
“Ella tiene una relación hermosa con el señor Armani. Ha usado la marca desde siempre", dijo Hartstein. “La temporada pasada con Glenn era un tema que tuvimos en el proceso”.
Close está muy interesada en la moda, y ha acumulado piezas personales, pero también los vestuarios de sus películas y otros proyectos a lo largo de sus casi 40 años de carrera. En 2017 donó su colección de vestuarios a la Universidad de Indiana.
La actriz Kaitlyn Dever dijo que su estrategia para la alfombra roja es la sustentabilidad.
“Los pido prestados”, dijo Dever en los Premios BAFTA del domingo. “Estoy tratando de ser más verde en cada aspecto de mi vida. ... realmente estoy tratando de hacerlo en todas las áreas. Creo que si tratas, aunque sea un poco, eso es algo”.
Jaclyn Alexandra Cohen, la editora de moda y accesorios de Harper's Bazaar, dijo que los diseñadores a menudo se quedan con los trajes.
“Ya sea que salgan de la pasarela o creados específicamente para una celebridad, la mayoría de los trajes que vemos en las galas se devuelven a la casa y se quedan en el archivo del diseñador”, dijo. “Muchos de esos vestidos únicos permanecen en la historia de la moda como estilos emblemáticos”.
amt