Al entrar a la villa número 5, la conexión con la naturaleza es inmediata. La piedra que forma los muros, la madera del mobiliario y los hilos de algodón que se reproducen en la cama, las hamacas, las lámparas y los tapetes materializan la esencia yucateca para crear el ambiente de bienestar que ofrece Oriundo Luxury Nature Villas.
“Al crear Oriundo ese fue el objetivo, queríamos que el huésped diga: ‘Aquí me desconecto de todo lo que viene de afuera’”, dice a MILENIO Deha Karolina Chehade Mugártegu, la diseñadora de interiores que se encargó de armonizar las 8 exclusivas villas de Oriundo, con las que arranca la nueva propuesta de Grupo Mesones, a tan solo 10 minutos del centro de Valladolid, en Yucatán; y 30 de la interesante zona arqueológica, Ek Balam.
El sonido de las caídas de agua, que forman parte de la decoración de la villa, acapara la atención y se suma a la armonía que se percibe en cada detalle y rincón de la habitación, donde tan solo con correr las cortinas el verde de la selva es una fiesta de color para la vista; así que el descanso es garantizado en medio de la naturaleza y el confort y lujo que aporta la modernidad; la cual también se ocupa de contrarrestar el cálido clima de la península yucateca con el sofisticado equipo que brinda la temperatura ideal para disfrutar al máximo la experiencia.
Y por si fuera poco, la propuesta de entretenimiento en la villa es tan variada que la elección se torna complicada, la posibilidad va desde relajarse en la tina con sales y veladoras aromáticas, disfrutar de la naturaleza en la piscina exclusiva de la villa o bien aprovechar la variedad de juegos de mesa en la terraza; ahora que para los que no se quieren desconectar del todo la diversidad de canales en el televisor es la elección. Y si el deseo es muy especial y va más allá de las amenidades que hay en la habitación, sodas, café y botanas, el servicio de concierge personalizado está pendiente para hacer más placentera la estancia, las 24 horas.
Orgullosa, en el camino que conduce a la alberca y donde se mantiene la paz y tranquilidad de todo el concepto, la arquitecta y creadora del concepto, Verónica Medina comparte a MILENIO su satisfacción por haber logrado “un espacio que represente a nuestra tierra en la época actual”, explicando con su particular acento yucateco que todos los materiales que se usaron para construir Oriundo son de la localidad “la piedra, la madera, incluso cada detalle de la decoración, como las jícaras que lo mismo adornan las paredes, que se ocupan para servir alguna salsa que complementa los clásicos platillos yucatecos”.
A unos metros, como parte de la experiencia que permite Oriundo está otro elemento de la cultura yucateca, un Cenote, el cual forma parte de Selva Maya, el parque recreativo también de Grupo Mesones, donde la acción y la adrenalina cobran protagonismo en las diversas tirolesas que desde las alturas permiten apreciar la selva en otra perspectiva.
Pero si el deseo es mantener la tranquilidad en el viaje a Valladolid, el cenote es la opción, máxime si el nado se disfruta de forma privada; y complementándolo con una cena a la luz de la luna con la propuesta del chef Elio Xicum, que hace de la gastronomía yucateca un festín para el paladar.
Claves
Creativas
El concepto combina la riqueza de la cultura maya
Deha Karolina Chehade
- Decoradora de interiores
- Retomó elementos como los hilos de algodón con los que se crean las hamacas para los detalles.
Verónica Medina
- Arquitecta
- Precisa que la orientación y conocer el lugar fue básico para crear el lugar de descanso enmedio de la selva.
Y Además
A tan solo 30 minutos de Oriundo Luxury Nature Villas, la zona arqueológica Ek Balam complementa la experiencia en Yucatán.
El Pueblo Mágico de Valladolid es otra de las opciones para agasajar los sentidos, si se desea ir más allá de la conexión con la naturaleza que brinda Oriundo.
caov