El entrenador Lionel Scaloni y los jugadores Cristian Cuti Romero, Julián Álvarez y Emliano Dibu Martínez criticaron este jueves las condiciones de la cancha del estadio Mercedes-Benz de Atlanta donde la selección de Argentina derrotó en el partido inaugural de la Copa América por 2-0 a Canadá.
"Con todo respeto, menos mal que ganamos, porque si no hubiese parecido que era una excusa. Hace siete meses que sabemos que tenemos que jugar acá y cambiaron el césped hace dos días. El estadio es hermoso y con el césped sintético tiene que ser espectacular, pero no está apta para estos jugadores", dijo en rueda de prensa.
Scaloni destacó que, aunque desde arriba se viese bien, la velocidad de pase de los centrales y la imposibilidad de filtrar pases, tanto por la defensa rival como por la inseguridad que creaba el terreno de juego le hizo cambiar el plan inicial. "No se podía hacer más, según las condiciones de la cancha".
Julián Álvarez, anotador del 1-0 a Canadá, también se quejó por el mal estado del campo de juego y dijo que los jugadores habían hablado y coincidieron en que "el campo no estaba en las mejores condiciones.
La selección Argentina sabía que el césped sintético sería levantado para reemplazarlo por uno natural pero solo pudieron pisarlo por primera vez este jueves a horas del encuentro inaugural.
El césped se cambió debido a las estrictas normas de la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol) en cuanto a la naturaleza de la grama utilizada en las competiciones organizadas por la entidad, que exigen pasto natural. Pero ni la NFL, que organiza el futbol americano en Estados Unidos, ni la MLS, exigen pasto natural, por lo que el Mercedes Benz mantiene su césped sintético para todas las competiciones que alberga.
Así que el sábado los medios que reportaron el encuentro por la MLS entre Atlanta y Houston informaron que la grama sería reemplazada una vez terminado el encuentro.
Así fue, y por eso el nuevo césped natural tuvo cuatro días para asentarse y solo hasta poco tiempo antes del encuentro los futbolistas pudieron pisar el terreno de juego.
Otro argentino que se sumó a las críticas fue Cristian Romero. "Arrancar bien un torneo era una cuenta pendiente. Pero las condiciones de la cancha hoy eran muy feas", declaró.
Dibu fue implacable con el estado de la cancha del Mercedes-Benz Stadium, y dijo a TyC Sports: "Tenemos que mejorar ese aspecto. O de lo contrario la Copa América siempre estará un nivel abajo de la Erocopa".
El próximo partido que se jugará en el Mercedes-Benz Stadium, y el último de la Copa América, será entre las selecciones de Panamá y Estados Unidos del 27 de junio.
RGS