Christian Eriksen mejor conocido en su núcleo familiar como El Chillón (debido a que de pequeño era muy sensible) curiosamente nació el día del amor y la amistad en Middelfart, Dinamarca.
Desde muy temprana edad Eriksen mostró sus dotes futbolísticos, motivo por el cual a los 15 años Barcelona, Milan y Chelsea (el conjunto inglés lo tachó de un jugador débil y no tan grande) lo invitaron a realizar pruebas con la intensión de incorporarlo a sus fuerzas básicas, pero no le llenó el ojo a ninguno de esos tres equipos a pesar de que antes de realizar sus pruebas se desvelaba observando videos de sus ídolos Zinedine Zidane, Ryan Giggs y David Beckham para aprender de ellos.
Su sueño de convertirse en futbolista profesional no culminó ahí y fue hasta 2008 que el Ajax de Holanda lo fichó y consiguió tres títulos consecutivos en la Eredivise (2010-11/2011-12 y 2012-13), dos años después se ganó un lugar en la selección de Dinamarca donde disputó el Mundial de Sudáfrica 2010 convirtiéndose en el jugador más joven del certamen.
Resurgió de las cenizas
Luego de vivir días de gloria con el Tottenham Hotspur (Premier Leagues) y el Inter de Milan (Serie A de Italia), Christian Eriksen viviría el episodio más complicado de su carrera profesional.
El duelo entre Finlandia y Dinamarca de la Eurocopa 2022 marcó un antes y un después en la vida de Christian Eriksen. Ese 12 de junio el futbolista de 30 años sufrió un paro cardiaco. Eriksen estuvo muerto por unos segundos, pero el RCP logró traerlo de vuelta.
Tras este episodio que conmocionó al mundo del futbol, Eriksen se sometió a una cirugía donde le implantaron un desfibrilador automático (evitará que sufra un nuevo episodio). Meses después el futbolista estaba listo para regresar a las canchas, pero la Serie A de Italia no le permitía jugar debido a que en el reglamento no estaba permitido jugar con este dispositivo, por lo que pensó que su carrera culminaría ahí, pero la esperanza no murió ahí, motivo por el cual estuvo entrenando en las filiales del Ajax, hasta que 259 días después (ocho meses) del infarto que casi culmina con su vida, Christian Eriksen reapareció en las canchas con el Brentford (Premier League).
La camiseta de la selección danesa la volvió a vestir en encuentro amistoso ante Países Bajos, encuentro en el que anotó dos minutos después de haber ingresado a la cancha. Hoy el objetivo de Eriksen es tener minutos de juego en el Mundial de Qatar 2022, los cuales seguramente tendrá, con el afán de que el selectivo tengan una motivación extra.
Está en riesgo
A pesar de volver a participar en el futbol profesional, la jefe de servicios de cardiología de Centro de Medicina del Deporte, adscrito al CDS Araceli Boraita indicó que Eriksen continua en peligro ya que no es una persona sana.
“Aunque nos duela decirlo, Eriksen no es una persona sana. Es un enfermo. Nadie que esté sano sufre una muerte súbita y él ha tenido la suerte de que lo reanimaran. Volver a ponerse en situación de extenuación, de descarga de adrenalina, de emoción fuerte, va a producirle descargas de adrenalina que le expondrán a un riesgo”, sentenció.
Christian no es la única estrella que tiene el cuadro de Dinamarca, pues también cuenta con el resguardo en la portería del hijo de la leyenda Peter Schmeichel, Kasper, quien es figura en el Leicester de la Premier League y con Simon Kjaer, quien hace unos meses sufrió una rotura de ligamentos por lo que fue enviado al quirófano y seguramente para la Copa del Mundo estará listo.
Otros jugadores de gran calidad que estarán en Qatar 2022 son Jannik Vestergaard, Daniel Wass, Andreas Christensen, Martin Braithwaite, Thomas Delaney y la estrella emergente Mikkel Dansgaard.
MGC