México adoleció en su debut en el Mundial de Qatar de gol, tal como en el último año. El Tricolor empató sin goles ante Polonia, pues, aunque tuvo llegada, no encontraba como tirar al arco rival, y cuando lo hizo, simplemente no estuvo fino. Y además, el empate se lo debe a Guillermo Ochoa, quien otra vez se luce en una Copa del Mundo, le paró un penal a Robert Lewandowski y evitó la caída del equipo.
Ni Henry Martín ni Raúl Jiménez pudieron meterla. Alexis Vega e Hirving Lozano destacaron con llegadas, pero faltó el remate a gol, y claro, la definición. Sin duda, Vega fue de los que más entusiasmo le puso al encuentro, el que más busco el balón, intentó llevarlo por la banda derecha en varias ocasiones, se metía al centro, robaba balones, aparecía en media cacha, adelante, o en donde fuera necesario, pero poco podía hacer un solo jugador.
Los primeros intentos llegaron por parte de Hirving Lozano, quien recorrió la banda derecha, pero no encontró quien rematar el esférico que llevó hasta el área rival. Después, Héctor Moreno remató muy desviado con la cabeza.
Ninguno de los dos equipos lograba quedarse con el balón, ambos intentaron, pero no podían. El equipo polaco estaba bien ordenado, y cuando robaban el balón eran muy rápidos, pero no lograban tirar a portería, porque el rival estuvo bien parado hasta ese instante.
El Tricolor tuvo otras oportunidades, cuando Héctor Herrera metió un centro para Alexis Vega, quien sacó un cabezazo que, lamentablemente para su causa, no llegó al lugar deseado.
México buscaba los espacios. Al minuto 36 encontró uno de nueva cuenta por la banda izquierda, que recorrió Jesús Gallardo, y ante la petición Alexis Vega que pusiera un balón largo, lo hizo, pero el atacante de Chivas no alcanzó el esférico.
Así transcurrían los minutos, con los pupilos de Gerardo Martino en la búsqueda de los resquicios, pero se encontraban de manera constante con las piernas de los polacos que sacaban todos los balones que llegaban a su territorio.
El segundo tiempo inició con la misma tónica, pero al minuto 55, Héctor Moreno le jala la playera a Robert Lewandowski en su intento de detenerlo, y el árbitro al revisar la jugada en el VAR determinó la pena máxima.
Entonces, Lewandowski se paró en el manchón penal, pero Guillermo Ochoa se recostó a su izquierda y con una mano la rechazó.
"¡Oe, oe, oe, oe, Memo, ¡Memo!", retumbó en el Estadio 974, con cerca de 30 mil mexicanos que abarrotaron el inmueble (su capacidad es de 40 mil y entraron 39 mil). Minutos después se pidió un penal a favor del Tricolor, pero no se marcó.
Por cierto, que, el árbitro fue abucheado constantemente. Poco marcó a favor del equipo mexicano, pese a faltas evidentes por parte de los polacos.
Aun así, el equipo insistió, y en un tiro de larga distancia de Alexis Vega, por poco y llega el tan anhelado tanto.
Al final, ni Raúl Jiménez, quien entró de cambio, consiguió cambiar el marcador del encuentro. México se llevó un punto en su primer duelo en el Mundial, y ahora, buscará sumar ante Argentina, que llega herido por la derrota ante Arabia Saudita.
DAO