Hipólito Antonio Vázquez Ojeda, mejor conocido como el “Oaxaco”, está en su quinto Mundial como aficionado. Tiene 74 años, lleva una corona de plumas (no penacho, porque el penacho es un puño de plumas), y porta con orgullo la camiseta del Atlante.
Ya usa un bastón, porque ya se cansa, pero el amor por el futbol y por la selección lo hace caminar distancias largas en Qatar para llegar a distintos lugares en los que se reúne la afición mexicana.
“Es lo más lindo que me pasó, porque yo tenía ganas, pero no me aventaba, un día me esposa me dice, te vas al Mundial, y le dije, ‘no quiero, no sé alemán, no se ni español, yo no fui a la escuela, y dice pues ahora vas, y cuando me di cuenta ya estaba arriba del avión para irme al Alemania”.
Su amigo de viaje está a su lado, Super Chile, a quien conoció en el avión que lo llevaría a su primera Copa del Mundo en Alemania 2006. “Ahí me encuentro al señor y desde ese día no nos hemos separado en cada Mundial nos vemos. Tenemos unidos cinco Mundiales desde Alemania, y cada Mundial nos hablamos y nos vemos donde es. Hace cuatro años nos vimos en Rusia y gracia a Dios la vida nos ha tratado muy a todo dar”.
Super Chile es de Ciudad Nezahualcóyotl, porta un sombrero de charro, un traje verde con el logo de un chile verde en el pecho, además de una capa roja. Él apoya al Oaxaco en sus aventuras: “Viene solo el señor, es muy aventado, nos hemos encontrado desde Alemania. Lo veo ya en los países donde es el torneo, ahorita tenemos pocos días y apenas nos estamos aclimatando”.
Don Hipólito, de barba larga y canosa, admite que él gasta su dinero en sus viajes, y que lejos está de invertir en otros temas, porque a él le gusta disfrutar el futbol.
“Es bastante caro venir, pero vale la pena, yo no compro ni terrenos ni casas, yo me lo gasto, porque luego por la herencia se están matando. Tengo tres mujeres y un hombre. Mi hijo me acompañaba, solo que ahorita está fincando, mis hijas se ponen muy contentas, y me dicen arriba papá, arriba del avión. Hoy, tengo 74 años y ya pienso en el Mundial de Canadá, a ver si llegó”.
En su corona de plumas tiene el nombre de “Oaxaco”, con los colores verde, blanco y rojo de la bandera, y adornado con algún tono rosa, pero atrás, tiene la bandera de Qatar.