Como en cada Mundial, el sueño del quinto partido se le esfumó de las manos a la Selección Mexicana. Argentina fue el verdugo del Tricolor en Alemania 2006. Maxi Rodríguez fue el encargado de sepultar las ilusiones aztecas con un gol imposible de no recordar.
El conjunto dirigido por el Bigotón, Ricardo La Volpe comenzó el duelo con gol de vestidor, pues a los seis minutos de iniciado el encuentro, el capitán Rafael Márquez llegó al segundo poste para perforar la meta Albiceleste.
Cuatro minutos después (10’), en un tiro de esquina, Jared Borgetti mandó el esférico al fondo de su propia meta, pero el gol fue cedido para Hernán Crespo y así poner el 1-1.
México aguantó los embates de Riquelme, Saviola, Tévez, Aimar y un joven de nombre Lionel Messi, enviando el encuentro a tiempos extras, no sin antes también generar jugadas en el arco defendido por el Pato Abbondanzieri.
Al minuto 98 del primer tiempo extra, Maxi Rodríguez dibujó una obra de arte sobre el terreno de juego. El mediocampista bajó la pelota de pecho y desde los linderos del área metió un zurdazo, imposible para cualquier arquero. Así con una pinturita de alfombra roja y caravana fue eliminado México.
Para llegar a esta instancia, la Selección Mexicana terminó como segundo del Grupo D con cuatro puntos, por debajo de Portugal, quien ganó sus tres encuentros por lo que acumuló 9 unidades.
En su debut mundialista el Tricolor venció a su similar de Irán 3-1 en Núremberg. Las anotaciones del conjunto azteca fueron un doblete de Omar Bravo (28’ y 76’) y uno más del naturalizado Antonio Naelson Sinha (79’). En el segundo encuentro, el combinado dirigido por el bigotón Ricardo Antonio La Volpe igualó sin goles (0-0) frente a Angola.
Para cerrar la fase de grupo, México se midió a Portugal, quien se impuso a los aztecas 2-1 con anotaciones de Maniche al minuto 6 y Simao Sabrosa (24’) marcó desde los 11 pasos.
El único gol del Tricolor fue por conducto del Kikin Fonseca al 29’.
DAO