Está hecho, Santiago Solari ya tiene a su primer refuerzo, uno que fue seleccionado por él y que le vendrá a solucionar uno de los déficits que el argentino ha detectado en las Águilas. El mediocampista español, Álvaro Fidalgo, procedente del Castellón de la Segunda División de España, fue el último fichaje que consumó la directiva en el cierre del mercado y llega en calidad de préstamo con opción a compra para potenciar la media cancha azulcrema hasta el final de la temporada.
Al final del partido con FC Juárez del martes pasado, el entrenador americanista expuso la necesidad que tenía de contar con un refuerzo. “El club sabe cuál es mi diagnóstico respecto a la plantilla… Hoy necesitábamos un 8 en el banquillo”, dijo Solari. La directiva su puso en marcha.
No fue fácil, pues los cupos de extranjeros estaban cubiertos, el domingo se cerró la salida de Andrés Ibargüen, vía la rescisión de su contrato. Las negociaciones con Fidalgo se habían puesto en marcha días atrás, Solari quería un jugador de su confianza y Álvaro fue el elegido, pues ambos coincidieron en el Real Madrid Castilla, de hecho fue Santiago el que lo hizo debutar con el primer equipo en la Copa del Rey el 6 de diciembre de 2018, en el juego que el Real Madrid ganó 6-1 al Melilla en el Santiago Bernabéu. Ese día entró de cambió por Vinicius Junior al minuto 78.
Dicen en España que Fidalgo es un mediocampista con buenas condiciones. A los 23 años hizo carrera en el filial merengue y para la actual temporada pasó al Castellón, club en el que ha jugado 23 partidos (22 de Liga y 1 de Copa del Rey), de los cuales ha sido titular en 13. Con las negociaciones en marcha, este sábado se quedó en el banquillo en el duelo que su equipo perdió ante el Almería por 3-1.
En su perfil futbolístico apuntan que se trata de un jugador al que es difícil superar en los duelos individuales, creador de juego y jugando como interior es como se le ven sus mejores condiciones, además de tener un buen regate. Vaya, que Solari le conoce y le pidió por algo.
Desde el club azulcrema comentan que buscaban a un jugador que tuviera un perfil parecido a Matheus Uribe, el colombiano que se marchó vendido al Porto después de un buen rendimiento, un jugador (al igual que Guido Rodríguez) que no han logrado suplir tras su salida.
Fidalgo tiene un margen de crecimiento y el reto de venir a México supone un reto personal y profesional. Será la primera vez que juegue fuera de su país y también su primera aventura en la Primera División. Por haber pasado en el Real Madrid se supone que la presión no le debe pesar. En Coapa Solari, ya espera a Álvaro para hacerlo uno de sus referentes. América está completo y la obligación ya se sabe cuál es.