La noche del domingo, después de la derrota de América ante Cruz Azul, el semblante de Santiago Solari lucía un poquito más serio. El entrenador de las Águilas reflexionaba sobre el descalabro de su equipo, apuntaba a lo exigente de los calendarios y también lamentaba los errores que se habían tenido en los últimos encuentros, sobre todo a nivel defensivo.
Y es que, al margen de que son torneos diferentes, América vivió un escenario nuevo, pues en lo que va de la era de Santiago Solari, el cuadro de Coapa no había encadenado dos derrotas seguidas, dos tropiezos que pueden llegar a tener secuelas anímicas, por lo que han significado cada una, más la Concachampions que privó al equipo de ir a un torneo internacional.
En los últimos 180 minutos que el club ha estado en el campo ha generado dudas, el romanticismo que había con Santiago Solari encontró una pausa y el aficionado se sentó a reflexionar también, porque no le gustó (sobre todo) la actuación del jueves en Monterrey, donde el equipo careció de capacidad de respuesta. Y ante Cruz Azul se perdió un duelo de orgullo otra vez por errores propios. Eso es lo que más le cala al aficionado, que es el propio equipo el que le abre la puerta a los rivales.
El desplome de la zaga
Un punto a trabajar de cara a la liguilla es la concentración en defensa, si bien la zaga azulcrema se había levantado como una de las mejores en el semestre ha habido tres momentos en los que ha mostrado flaqueza.
El primero fue en el juego de la Jornada 9 contra Toluca, el equipo de Solari ya era líder del torneo y en las 8 jornadas previas (720 minutos) solo había recibido tres goles y mantenía su condición de invicto. Pero en el infierno pasó una noche de terror. A punta de cabezazos los Diablos castigaron a la defensa amarilla, en 60 minutos recibieron la misma cantidad de goles que llevaban en todo el semestre, se acabó el invicto del equipo, pero mantenía el liderato.
El segundo juego donde la defensa flaqueó fue en la final de la Concachampions contra Monterrey de la semana pasada, cuando la presión no llegó a tiempo para evitar la jugada del gol de Rayados. Montes lanzó el trazo largo ante la mirada de Fidalgo, Jorge Sánchez y Bruno quedaron fuera de lugar ante la buena asociación de Gallardo y Maxi Meza, y lo de Cáceres ya se sabe cómo acabó.
El tercero llegó en el duelo del domingo ante Cruz Azul, el partido ya agonizaba, todo pintaba para un empate, pero Bruno le regaló la pelota Jonathan Rodríguez en la salida y la acción acabó con un doble castigo. Aguilera cometiendo penal y marchándose expulsado por la falta que le cometió a Orbelín Pineda. El Cabecita marcó el penal y le propinó otra derrota al cuadro de Coapa que se quedará sin Aguilera para el duelo con Rayados.
Descanso y reacción
Solari se refirió al exigente calendario, tiene razón, pero no es el único equipo que ha aportado jugadores a selección mexicana y sudamericanas; sin ir más lejos, el propio Rayados tuvo 8 jugadores del primer equipo convocados a la más reciente Fecha FIFA (5 selección mexicana y 3 en Sudamérica), mientras América tuvo 7 de su primer equipo (4 de México y 3 de Sudamérica).
Además, América, con la ventaja que tenía en el puntaje, pudo haber reservado jugadores en el duelo con Tigres, pues antes de la Jornada 15 tenía 8 puntos de ventaja sobre Atlas que era segundo y 9 sobre Tigres y Toluca que eran, en ese momento, tercero y cuarto de la tabla.
América apostó por los tres puntos contra Tigres y no reservó jugadores, perdió a Pedro Aquino por lesión y el peruano no jugó contra Monterrey. Mientras Rayados sí hizo algunas rotaciones pensando en el juego contra América, aunque perdió a Duvan Vergara por conmoción. Cayó en el juego con Necaxa, pero llegó fresco al choque con las Águilas.
Como sea, América necesita recuperarse en lo emocional y en lo futbolístico para el juego de la última jornada con Monterrey. Después tendrá un par de semanas para recuperar a sus jugadores que acarren alguna molestia. En la Liguilla no puede haber más pestañeos porque te vas a casa.
SFRM