América expone su condición de favorito ante Toluca. El líder general se juega echar abajo la “maldición del superlíder”, esa tendencia que aflora en los torneos cortos y que es lapidaría, pues de los 51 campeonatos que se han celebrado desde el Invierno 1996, solo en 9 ocasiones el mejor equipo de la fase regular ha alcanzado la gloria.
Sí, torneo a torneo se habla de ello, jugadores y entrenadores la desacreditan y muchos han terminado retratados, no se sabe a ciencia cierta por qué ocurra, quizá sea exceso de confianza, como si pensaran que el sitio de honor concede muchos más privilegios, pero el césped no conoce de posiciones en la tabla, sino de rendimientos inmediatos y, sobre la hierba, el que llega en mejor estado emocional y futbolístico es el que termina cantando victoria.
Malos antecedentes
Son 42 torneos en los que el líder general no se ha podido coronar, es decir, que se cumple ese adagio de que a la Liguilla no se debe llegar primero, sino en una buena forma, porque incluso equipos que han salido de los puestos de abajo han quedado campeones.
El primer conjunto en experimentar ese descalabro fue Atlante, pues en el Invierno 1996 -el debut de los torneos cortos-, los Potros se quedaron en la ronda de cuartos, de hecho, es la instancia en la que más veces ha caído el mejor equipo del torneo, pues ha tropezado hasta en 22 ocasiones.
Asimismo, el líder también se ha quedado 6 veces en la ronda de semifinales y en otras 14, si bien ha llegado a la Final, no ha podido ratificar su buen torneo en la serie por el título.
La tendencia de América
En el caso de las Águilas, el cuadro de Coapa ha logrado el sitio de honor en siete oportunidades, pero solo en una ha sido capaz de acompañar el primer puesto con el trofeo de campeón, ocurrió en el Apertura 2014, cuando el equipo era dirigido por Antonio Mohamed y venció en la Final a los Tigres de la UANL.
En otras cuatro ocasiones, el conjunto azulcrema se quedó en cuartos de final después de haber dominado la fase regular. Una vez fue subcampeón y solo una vez perdió en semifinales, fue en el Verano 2001, cuando Santos Laguna lo dejó fuera en la antesala del título.
De hecho, la última vez que el cuadro azulcrema fue líder, que despertó una gran ilusión en su afición y que terminó ofreciendo una imagen bochornosa en el campo fue hace un año, cuando en el Apertura 2021 el conjunto de Santiago Solari fue el mejor de la fase regular, pero en los cuartos de final fue eliminado por Pumas en el estadio Azteca con un global de 1-3.
Una buena y una mala
El escenario que hoy vive América ya lo experimentó en torneos cortos ante los Diablos. En el Apertura 2013, el conjunto de Miguel Herrera llegó como líder a la Liguilla, en la semifinal de ida perdió con Toluca por 2-1, pero ganó el juego de vuelta por 2-0.
Había un éxtasis en el americanismo que veía cerca un bicampeonato, pero en la Final se cruzaron con el León de Matosas que les ganó el título.
El América de Fernando Ortiz llega en desventaja, pero le avala el invicto que tiene el Tano en el estadio Azteca. De 15 partidos con Ortiz en el Coloso de Santa Úrsula, ha ganado 11 y empatado 4. Con los boletos agotados y una ofensiva que registra 50 goles, buscará desterrar la “maldición del superlíder”.
MGC