Diego Valdés llegó como el refuerzo de mayor calidad al América. El volante chileno ya había demostrado en el futbol mexicano la calidad con la que cuenta, es un armador nato de juego, pero también ha dejado ver sus dotes como definidor. El americanismo se ilusionó con su llegada, pues llegaba a portar su playera un jugador capaz de cambiar el curso de los partidos.
El aterrizaje no ha sido el esperado, una lesión muscular lo tuvo algunas semanas trabajando por separado, apenas va cogiendo la idea futbolística de su nuevo club; como el arranque del equipo no ha sido el esperado, las críticas y la exigencia se presentan y la paciencia se acorta.
En entrevista con MILENIO-La Afición, el chileno repasa lo que han sido estas primeras semanas en Coapa, su estado de forma y el momento actual del equipo, que, dicho sea de paso, vive una crisis de resultados en el torneo, pero Diego lo toma con serenidad y hace lo posible por mandar un mensaje de optimismo en estos días grises para el americanismo.
El chileno admite con un monosílabo que la situación está complicada y apela al trabajo y esfuerzo diario para salir del estado de alerta. “Es lo principal en esto, sabemos que trabajando uno puede lograr cosas importantes, nadie quiere empezar así, creo que todos se preparan para empezar de la mejor manera, pero no nos están saliendo las cosas como quisiéramos, pero trabajando vamos a salir de esta rachita que nos ha tocado”.
Sobre si en algún momento llegó a pensar que fuera ser así de complicado su primer torneo apuntó que “no es que lo pensara, uno es futbolista y tiene que adaptarse; si hubiéramos empezado de la mejor manera también diría lo mismo, tengo que estar preparado para toda ocasión, igual mis compañeros y el cuerpo técnico, sabemos que los otros equipos también se preparan de la mejor manera y sabemos que lo vamos a sacar adelante”.
El americanismo está molesto, cuestiona en redes sociales y silba en el campo, no le gusta lo que muestra su equipo, y Valdés, al que muchos veían como el salvador del equipo, solo tiene un mensaje para la afición: “Que confíe en nosotros, hablo en general porque entramos once al campo, se hablan muchas cosas en la parte personal, pero que confíe en nosotros, lo vamos a sacar adelante trabajando y entrenando, porque es verdad que nos entregamos al cien por ciento en cada entrenamiento y lo vamos a sacar sí o sí adelante”, repite.
Aunque hoy América está fuera de los puestos de Liguilla, dice convencido que serán un candidato al título. “Obviamente, sabemos que América siempre tiene que estar peleando arriba y como te dije, no empezamos de la mejor manera, pero estoy completamente seguro que vamos a estar arriba, que vamos a estar en los primeros lugares y clasificar para hacer una buena Liguilla”.
Asume el peso del 10
Cuando llegó a Coapa, Diego no tuvo reparo en pedir el número 10, consciente del peso que tiene ese dorsal en el mundo del futbol y que en América suele ser una playera que puede catapultar a un futbolista o marcarlo para mal.
“En lo personal lo tomo muy tranquilo, sé que es un número muy importante en el club, cuando llegué al club fui yo el que pidió ese número, me sentía cómodo y seguro para adquirir ese número, y esperar que nos vaya bien y me voy a preparar al cien para eso”.
Hace unos días Carlos Reinoso, un ex futbolista chileno que marcó época en las Águilas, dijo en una entrevista en ESPN que veía a Diego a un jugador capaz de convertirse en ídolo si canaliza la presión, y Valdés no le tiene miedo al reto.
“Está en lo correcto, uno tiene que saber vivir con la presión y tomársela como me la vengo tomando yo, muy tranquilo, sabemos que tiene mucha presión este equipo y está bien, el jugador tiene que estar preparado para eso, es como la tengo acá, en selección o la que he tenido en distintas ocasiones, tenga el número 10 u algún otro, sabemos que el jugador tiene que estar preparado al cien por ciento y sabemos también que si nos va bien, la presión también te ayuda mucho”.
MGC