A falta de una postura oficial que sea anunciada por el club y que sirva como respuesta. Renato Ibarra pide seguir en América, quiere que le den una oportunidad y asegura que nunca hubo una agresión física hacia su pareja Lucely Chalá aquel jueves 5 de marzo, pero sí admitió que hubo agresiones verbales.
En una entrevista en ESPN, el volante ecuatoriano habló de lo que ocurrió aquella noche que terminó con el futbolista pasando una semana en la cárcel, acusado en primera instancia de feminicidio en grado de tentativa y de tentativa de aborto, cargos que fueron retirados por su ex pareja al llegar a un acuerdo y todo quedó en un cargo de violencia familiar por el que alcanzó fianza y ese proceso sigue vigente, pues tiene que acudir a firmar cada vez al reclusorio por seis meses, de los cuales ha cumplido tres meses.
“Significa mucho es importante para mí seguir en el América, firmé una renovación (hasta 2023) y pueden ser para mí mis mejores años los que están por venir”, dijo. Después reiteró sus disculpas a todas las mujeres que se hayan sentido ofendidas por sus actos, a su ex pareja y a la afición del América. Y contó su versión sobre lo ocurrido en su casa.
Dijo que esa noche tuvo lugar “una discusión verbal que no pasó a una agresión física como lo han manejado muchos medios”, aunque fue la Fiscalía la que calificó los hechos como graves. Aceptó que la discusión fue fuerte y se salió de control, que él se exaltó y reconoció que se excedió en “insultos y con la discusión”.
A la pregunta de cuál fue la agresión dijo: “agresión verbal, insultos fuertes, que pasaron ese día hemos tenido siempre discusiones, pero esta sí se salió de control, hubieron insultos muy fuertes”.
Aseguró que “nunca llegué a golpearla” y que cuando vio la llegada de las patrullas le sorprendió la rapidez con la que arribaron a su domicilio y que entre 8 y 9 oficiales lo sacaron de su casa a los que les dio la explicación de los hechos.
Apuntó que en el traslado de la patrulla hacia el Ministerio Público hubo un cambio de delegación y lo terminaron llevando a la de Tlalpan. Aceptó que la semana que pasó en prisión “fueron días súper difíciles, la semana que pasé privado de mi libertad lloré como un niño, fue una experiencia muy mala, lo todas las noches no dormía”.
Sobre el cambio de abogados hasta en dos ocasiones, Renato dijo que fue por estrategia de su familia. Y dijo que no sabe por qué Lucely habría declarado en primera instancia que la había agredido, aunque lo atribuye a que pudo ser “por el enojo y la frustración, sé que la pasó muy mal por todos los insultos que recibió de mi parte” y que ha hablado con ella y ha reconocido que ella tampoco sabe por qué lo declaro.
Sobre el acuerdo dijo que el mismo comprende que él le tiene que proveer de un “departamento y un auto” y a dicho convenio se llegó porque ella está viendo por el bienestar de sus hijos. Ibarra apuntó que la oportunidad que pide es porque “todos somos seres humanos, sé que me equivoqué y lo asume con responsabilidad”. Y sobre la medida cautelar que le impusieron de asistir a cursos de violencia de género es algo que está buscando en conjunto con sus abogados.
Otra oportunidad
A los aficionados del América les pidió otra oportunidad porque dijo que en la cancha siempre ha sido un tipo correcto. Sobre cuando volvería a entrenarse con el equipo dijo que esperaría que fuera lo más pronto posible porque extraña a sus compañeros “y si el América me da esta segunda oportunidad dar lo mejor de mí como siempre lo he hecho”.
Renato aceptó que en los últimos tiempos recibió ayuda económica de parte del club cuando empezó a faltarle el dinero. Dijo que de esta situación aprendió que un momento puede cambiar la vida por un error y que en el futuro se compromete a no cometer ese tipo de errores.
Y sobre el mensaje que le manda a Emilio Azcárraga sería: “decirle que todos los jugadores que representamos al América tenemos que ser un ejemplo dentro y fuera de la cancha y pedirle una sincera disculpa por lo que pasó y por lo que se involucró al América en ese momento”.
La última postura oficial que hubo del América respecto a este tema, fue el comunicado del jueves 12 de marzo, cuando anunció. “El club América reitera su compromiso absoluto y cotidiano para contribuir a erradicar la violencia de género y a promover una cultura de respeto hacia las mujeres. En este sentido reprueba tajantemente los actos realizados por el sr. Renato Ibarra. Dado lo anterior, lo que se ha reportado en medios y por parte de las autoridades, se ha determinado separar de manera definitiva del plantel al jugador”.