Dos Santos, Castillo y Díaz, de la ilusión a la desilusión en América

Edición Fin de Semana

Los tres jugadores que no seguirán en el América llegaron con altas expectativas, pero acabaron en futbolistas que aportaron poco y solo quedarán en el registro de que alguna vez pasaron por el club

Dos Santos, Castillo y Díaz, de la ilusión a la desilusión en América (La Afición)
Higinio Robles
Ciudad de México /

América sigue de vacaciones, analizando las opciones que le permitan ser un equipo protagonista el próximo semestre, valorando los refuerzos que pueden darle ese salto de calidad que requiere, porque hay jugadores que no seguirán en Coapa. Aunque no hay una lista oficial de bajas, hay futbolistas que no seguirán en el Nido, su ciclo se ha terminado y se marchan porque su paso terminó siendo una anécdota y no algo que haya dejado huella. Tipos como Giovani dos Santos, Sergio Díaz y Nicolás Castillo no seguirán en el club. Y, a ciencia cierta, la afición tampoco les va a echar de menos.

Gio un espejismo

Hubo una época en la que Giovani dos Santos se declaraba americanista, eran los días en los que Gio se mantenía como un jugador de élite. Había la duda de si algún día llegaría a jugar con las Águilas, porque se veía que su carrera la podría realizar fuera de México y quizá venir al país a pasar los últimos días.

En julio de 2019, América anunció la llegada del mayor de los Dos Santos como refuerzo para el Apertura 2019. Se hacia realidad el sueño de Giovani, llegaba al club procedente del LA Galaxy, donde su rendimiento había venido a menos, pero en Coapa se creía que se le podía ayudar a recuperar su mejor versión. Nunca pudo ser.

Después de dos años Giovani se va, se le abre la puerta porque nunca llegó a ser ese jugador que brilló en antaño, a los 30 años ya no hay confianza en él, se la pasó más tiempo en procesos de recuperación que en el terreno de juego, afectado por las lesiones musculares, lo único que dejó como buen recuerdo fue un gol en un Clásico Nacional, de ahí en fuera, más decepciones que buenas sensaciones.

Tras la salida de Miguel Herrera y con la llegada de Santiago Solari, tampoco fue capaz de pelear por un puesto, la última vez que el entrenador argentino lo mandó al campo de juego fue en la Jornada 14. En los despachos de Coapa tenían claro que la salida de Giovani era necesaria para ahorrarse ese salario. Fue una inversión que no fue rentable en lo deportivo. Gio se marcha dejando más deudas que recuerdos futbolísticos.

Díaz, merengue insípido

Sergio Díaz llegó como refuerzo a mitad del año pasado, antes del inicio del Guard1anes 2020, el cuadro de Coapa lo anunció como un fichaje que traía el cartel de haber pasado por las filas del Real Madrid, aunque llevaba tiempo cedido en otros países, desde el conjunto azulcrema siempre se defendió la idea de que si el Madrid lo fichó es porque le vio algo.

Pero la realidad de Díaz en Coapa es que fue un jugador que nunca logró consolidarse, jugó a cuentagotas, porque acusó lesiones musculares, además de que el proceso de adaptación tardó más de la cuenta, incluso el propio Miguel Herrera admitió que se había equivocado en el fichaje del guaraní que en el campo regaló escasos detalles.

Con la llegada de Solari se pensaba que quizá podía recuperar protagonismo, pues el entrenador llegó a conocerle en su paso por Chamartín, pero no fue así. Es más, Díaz apenas apareció en algunas convocatorias, de nuevo una lesión lo tuvo de baja y la mayor parte del torneo fue uno de los dos extranjeros que estuvo destinado al palco. El préstamo vence y en Coapa lo mandará de regreso. Otro desatino de la directiva.

Nico, un caso especial

El caso de Nicolás Castillo es especial, no es algo que pase únicamente por lo deportivo, se junta también lo médico. El delantero chileno fue la gran apuesta para reforzar la ofensiva a inicios de 2019, pero Nico llegaba con falta de ritmo por la poca actividad que tuvo en el Benfica de Portugal.


Aparecieron las lesiones que lo tuvieron de baja, no lograba ponerse a tono o cuando regresaba de nuevo surgía alguna molestia. En el inicio de su segundo torneo sufrió una fractura de peroné. De nueva cuenta a pasar tiempo fuera del campo. Regresó antes del final del torneo, pero no estaba en buenas condiciones físicas, fue suplente en la Liguilla y en la final contra Monterrey fue uno de los jugadores que falló uno de los penales.

Y a inicios de 2020 la peor pesadilla. Nico fue operado de una lesión en el recto femoral, tras la cirugía presentó una tr
ombosis que fue atendida de emergencia, salvó la vida por primera vez, el futbol pasó a segundo término. Cuando fue dado de alta y regresó a casa sufrió una hemorragia que logró ser atendida de urgencia. Segunda vez que salvó la vida.

América cumplió con el delantero, estuvo al pendiente de él, le apoyaron en lo que debía. Tras un largo proceso de rehabilitación, en diciembre fue operado en Atlanta, una cirugía que le permitiría volver al campo, como el mismo anunció en sus redes sociales.


En principio se pensaba que quizá sería tomado en cuenta para el Apertura 2021, pero no fue así, según reportó ESPN, la directiva le ha trasladado al chileno que no entra en planes, se le busca salida, pero en Coapa saben que será muy difícil que algún club pague su salario y lo reciba sin antes hacerle una serie de exámenes médicos. Y tampoco están dispuestos a asumir riesgos.

Castillo quiso, pero no pudo brillar en Coapa, con él fueron cuestiones médicas que estuvieron fuera de sus manos, el chileno fue una gran apuesta para solucionar la falta de gol, tuvo algunos pasajes buenos, pero también se marcha del Nido con la sensación de que fue otro fichaje que se quedó lejos de las expectativas.


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