El triunfo ante Uruguay en la final del Mundial Sub 17 le abrió las puertas de Europa al ‘Pollo’ Briseño, pero le faltaron consejeros, le dio miedo y pese a que tenía la oferta del filial del Real Madrid, no se fue y se quedó en el Atlas, pese a que no tenía contrato con el feudo rojinegro.
"Lo que hubiera hecho a los 17 años, es haberme ido a Europa cuando tuve la oportunidad, porque después de ser Campeón del mundo tuve la posibilidad de ir a Europa con el Real Madrid Castila en Segunda División, tuve la oportunidad de firmar con el Manchester City, tuve la oportunidad de firmar con el Mallorca y un equipo ruso”.
Briseño afirmó que solo era cuestión de que cualquier equipo pagara los derechos de formación y así dar el brinco a Europa, pero no se atrevió a hacerlo.
"A los 17 años quedaba libre, había que pagar el derecho de formación y creo que me dio un poquito de miedo al no saber, de ver los ejemplos… muy mal de mi parte porque no estaba informado. Hablé con gente importante que me decían que me quedara, que me consolidara, pero nunca me imaginé lo que iba a pasar aquí en México: que se iban a llenar de extranjeros, que ya no habría regla de 20/11. Quizá hubiera salido y me hubiera gustado mucho más aprender en el extranjero".
El Capitán ‘Pollo’ como se le decía en la 2011 también pudo dar el brinco a los 20 años, cuando disputó el Mundial con límite de edad, pero tampoco se dieron las cosas, aunque al final se fue a Portugal donde logró regularidad.
“Tuve la oportunidad de irme a los 17 y no me fui; pude irme a los 20 y tampoco me fui, aunque tuve un precontrato que no firmé con el Sassuolo en Italia, un equipo recién ascendido en 2013 y son decisiones que se toman.
"Cuando me fui hace tres años a Portugal, si hubiera llegado antes habría sido una historia totalmente distinta. Lo único que hubiera cambiado sería irme a los 17, hubiera cambiado toda mi historia, mi forma de vivir el futbol. No me arrepiento de nada, a lo mejor lo cambiaría, pero no me arrepiento de quedarme a debutar en México", expresó.
MC