El equipo de Atlas regresó a los trabajos después del descanso por la Fecha FIFA y lo hizo de una manera muy especial arropado por sus aficionados.
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Los dirigidos por Benjamín Mora se trasladaron al municipio de Tlajomulco de Zúñiga para un entrenamiento a puerta abierta al que asistieron cerca de 3 mil personas, que corearon y apoyaron por lapso de una hora a sus ídolos.
Anderson Santamaría, Edison Flores y Camilo Vargas son las bajas con las que los Zorros entrenan esta semana debido a que se encuentran concentrados con sus respectivas selecciones para la Fecha FIFA.
Pocas son las oportunidades en que los aficionados pueden acercarse de esta manera al plantel, pues Madriguera Rojinegra, actual casa del club, no cuenta con la infraestructura para recibir aficionados.
De hecho, es un tema para el que se trabaja en la nueva Academia, pues se instalará un “mini estadio” con graderías para que la afición pueda volver a los entrenamientos del primer equipo, femenil y observar juegos de fuerzas básicas, siempre que la agenda lo permita.
Evidentemente, uno de los más coreados y aplaudidos fue el atacante Julián Quiñones, que continúa consolidándose como uno de los jugadores favoritos de La Fiel y que tiene contrato hasta 2026.
Atlas dejó las instalaciones cerca del mediodía, no sin antes darse tiempo de atender al graderío con autógrafos, fotografías y a los más afortunados lograron llevarse las camisetas de sus ídolos como recuerdo.
MC